De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
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De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Jue Mar 29, 2012 5:14 am
Todo había salido bien, finalmente, fue el pensamiento general que tuve en mente el lunes tras el colapso del fin de semana. ¿Cuando uno tranquilo? Vaya usted a saber...Al parecer es mi sino. Curiosamente no es el jaleo en la fiesta o el que casi nos maten y hallamos librado por los pelos...rubios del ken menor, ese que casi ni se pronuncia...no, para mi el colapso vino después, y ahora que lo pienso, dejarse llevar no parece tan malo, yo, al menos, no me arrepiento. No es como si hubisemos prometido amor eterno o la hubiese ido a buscar a su casa para acompañarla a clase el lunes, nada de eso, pero al menos fuimos capaces de sonreirnos de pasada y no tirarnos nada a la cabeza. Creo que esta vez comprendió que no intento putearla y que soy lo más sincero que puedo con ella.
Hoy es martes, y la he visto brevemente en el pasillo del segundo piso, de camino a una clase, no me he parado a saludarla, claro, eso se vería raro y la gente preguntaría, cosa que no me conviene, pero he aprovechado para acariciarle la mano al pasar y cuando me he girado he visto su sonrisa. Eso me ha alegrado el día.
Ahora es otra chica la que llama mi atención de hecho, porque la nueva y flamante animadora, que, según mi punto de vista, quedaría más propia en una barra americana, me hace señas escondida en la esquina de un pasillo. La miro, me mira, me hace un gesto con la mano indicandome que vaya. Miro atrás, a ver si es que busca a alguien más, pero no veo a nadie. La mandaría al cuerno directo pero el caso es que hace tiempo que quiero hablar con ella, a solas mejor. Miro la hora, es tarde, si voy con ella me perderé la clase. ¿Qué hago? no puedo permitirme demasiadas faltas, eso queda en el expediente y luego a la hora de revisar mi independencia cuenta. Pero insiste, y supongo que debe ser algo urgente así que voy hacía ella y me paro al hacerme unas señas. ¿En serio? Pretende que me quede en la esquina del pasillo que linda donde está, cada uno mirando a un pasillo opuesto, como si no estuviesemos hablando....estos niños pijos...pero vale. A mi me da lo mismo, no necesito que me asocien con una animadora rubia y de cascos flojos.
- ¿Para qué soy bueno?- pregunto entonces, bajando la voz y en un tono indiferente. Asumo que quiere o necesita algo, espero que no sean drogas, porque ciertamente aseguro que no voy a darle nada más fuerte que un cigarro.
Hoy es martes, y la he visto brevemente en el pasillo del segundo piso, de camino a una clase, no me he parado a saludarla, claro, eso se vería raro y la gente preguntaría, cosa que no me conviene, pero he aprovechado para acariciarle la mano al pasar y cuando me he girado he visto su sonrisa. Eso me ha alegrado el día.
Ahora es otra chica la que llama mi atención de hecho, porque la nueva y flamante animadora, que, según mi punto de vista, quedaría más propia en una barra americana, me hace señas escondida en la esquina de un pasillo. La miro, me mira, me hace un gesto con la mano indicandome que vaya. Miro atrás, a ver si es que busca a alguien más, pero no veo a nadie. La mandaría al cuerno directo pero el caso es que hace tiempo que quiero hablar con ella, a solas mejor. Miro la hora, es tarde, si voy con ella me perderé la clase. ¿Qué hago? no puedo permitirme demasiadas faltas, eso queda en el expediente y luego a la hora de revisar mi independencia cuenta. Pero insiste, y supongo que debe ser algo urgente así que voy hacía ella y me paro al hacerme unas señas. ¿En serio? Pretende que me quede en la esquina del pasillo que linda donde está, cada uno mirando a un pasillo opuesto, como si no estuviesemos hablando....estos niños pijos...pero vale. A mi me da lo mismo, no necesito que me asocien con una animadora rubia y de cascos flojos.
- ¿Para qué soy bueno?- pregunto entonces, bajando la voz y en un tono indiferente. Asumo que quiere o necesita algo, espero que no sean drogas, porque ciertamente aseguro que no voy a darle nada más fuerte que un cigarro.
Jake Parrish- Admin
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Jue Mar 29, 2012 9:43 am
-lo usaré después, Meredith- respondo a lo que parece ser el epitome perfecto de una capitana obsesa con aumentar el espíritu escolar y el {animo del equipo al llevar el uniforme a todas horas en todas las clases. Si, eso podría ser, pero conociéndola bien, y comenzaba a conocerla, también se trataba de un básico; el simple arte de mostrar las piernas y tener a la mayor parte de los estudiantes masculinos, literalmente babeando.
No es que me moleste mostrar la piel, jamás lo había hecho, pero simplemente, no deseo parecer animadora todo el tiempo, con una cinta en el cabello que forma a su vez una perfecta coleta rubia, alta y bien peinada y un maquillaje "natural, pero sexy" como la mayoría de las chicas, inclusive las que no son animadoras suelen usar.
Suspiro entonces, aferrándome a mis libros y argumento una clase que debía tomar. después de esta, me uniría con ellas y estaría en aquella preciosa falda verde con detalles grises. Antes no.
Acomodo mi cabello por sobre uno de mis hombros y le ofrezco una de mis mejores sonrisas -lo se- añado al escuchar el nombre de Alex en sus labios. Si, se que estamos bien, que nos vemos bien, pero ella no tiene ni idea de lo que siento por ese rubio, no tiene ni idea la explosión de cosas que logra en mi una y otra vez, pero agradezco sus comentarios -tenemos química... algo que en serio, debo tomar justo ahora. Las veré en prácticas- y solo con eso, me safé de momento de su acoso.
me toma doblar un poco algunos pasillos, hacerme con discreción del horario de Parrish y apagar el móvil. Simplemente no deseo ser encontrada, tengo otro objetivo en mente.
Es curioso que el efecto sigue siendo casi el mismo, solo que potenciado, antes tenía mi efecto sobre el estudiantado, ahora en serio me abren paso apenas camino, como Moisés en el mar rojo.
Que es lo que se encuentra el que es capaz de verme? unas piernas bien torneadas, enfundadas en unas delicadas medias oscuras, sobre estas unas botas hasta poco abajo de la rodilla. no llevo tacones esta vez... arruinaría el atuendo. si se sigue por la misma linea, pero en sentido ascendente después de las medias encontrarían más tela, un short de una excelente tela, que me llega a la mitad el muslo, y, para sorpresa de todos, no es ajustado, simplemente insinúa, no exhibe. aquella indumentaria va combinada por blusón ligero y holgado que cae por uno de mis hombros desnudandolo pero sin ser demasiado largo, solo lo justo, de tono claro y que resalta el actuando por completo. Bolso, libros y un peinado, un buen peoinado. Eh dejado un poco el maquillaje dramático. Al menos eso tengo, jamás me eh maquillado como prostituta, eso se los dejo a tantas imitaciones mías.
Siento mi cabello mecerse a la par de mi andar, pareciera que todo estaba bien en mi vida, incluso me doy el lujo de sonreír.. es lo bueno de saber fingir bien, o que se te ha creado una fama de descaro que ni el mismo Merlín pudiese manejar. La vida parece plácida para las descaradas, la fachada es perfecta y te ahorras cualquier tipo de conmiseración y la etapa de victimismo, que honestamente, no me va... o me ha ido nunca.
Por dentro, claro que tengo dudas, inquietudes y temores... muchos temores. el sábado casi morimos, el sábado casi mueren mis dos personas favoritas, esa misma noche, efectivamente mi mejor amigo murió y resucitó sin algún milagro religioso de por medio... y también estaba esto. la necesidad de hablar con Jake Parrish, que, si antes era importante, ahora se me convertía en prioridad. Aún siento algo, pequeñas secuelas, brotes de chispas de lo que antes fue una llamarada... esta ahí y me da temor, Parrish dijo que sucedería y sucedió... el debe tener más respuestas.
Le encuentro entonces y solo bastó una mirada intensa que el pareció entender bien y un gesto para que me siga. no le espero, me importa muy poco que me vean con el o no, es que simplemente el parece ser un lobo solitario, no pretendo quitarle su estatus si tanto le agrada. me quedo en el pasillo y logro que el me siga, quedando del otro y viendo en dirección contraria. no me interesa guardar las apariencias, empero, solo que con este hombre no hay que intentar ser dulce como la miel, cuando lo que le gusta es la hiel.
Al fin habla y simplemente, me parece una broma ¡para que es bueno?... tal vez eso se lo debiera preguntar a la pelinegra, seguro ella tiene muchas mejores referencias, -espero que para más de una cosa- respondo con ligeros toques de burla y coquetería. Perfecto, adoro que la seguridad se me salga desde los poros o el tono de voz. humedezco mis labios y le doy media sonrisa mientras comienzo a buscar entre mis anotaciones, de manera completamente descuidada -pero supongo que eso lo dejaremos como elemento sorpresa- agrego justo antes de pasar de página en mis apuntes. la gente se va alejando de a poco, aun no estamos solos y eso lo complica -sabes que es lo malo de la historia, Parrish?- y antes de que responda agrego -si, todo mundo lo dice, si no se sabe se esta condenado a repetirla... pero que hay de los que quieren aprenderla?... donde buscar lo necesario para saber a que deben enfrentarse?-
Entonces, solo entonces veo a sus ojos y se que el lo entiende, por supuesto que entiende el mensaje, solo ay que ver como sus orbes se contraen y su rictus cambia -tu eres un buen historiador y es por eso que quiero hablar contigo- no espero más y me recargó en uno de esos lockers para finalmente verle sin necesidad de fingir y, más serena y sin actitud de aparente soberbia le confieso -el miedo se siente bien, da poder... pero el poder jamás había sido temido... ahora lo hago y no pienso seguir así.-
No es que me moleste mostrar la piel, jamás lo había hecho, pero simplemente, no deseo parecer animadora todo el tiempo, con una cinta en el cabello que forma a su vez una perfecta coleta rubia, alta y bien peinada y un maquillaje "natural, pero sexy" como la mayoría de las chicas, inclusive las que no son animadoras suelen usar.
Suspiro entonces, aferrándome a mis libros y argumento una clase que debía tomar. después de esta, me uniría con ellas y estaría en aquella preciosa falda verde con detalles grises. Antes no.
Acomodo mi cabello por sobre uno de mis hombros y le ofrezco una de mis mejores sonrisas -lo se- añado al escuchar el nombre de Alex en sus labios. Si, se que estamos bien, que nos vemos bien, pero ella no tiene ni idea de lo que siento por ese rubio, no tiene ni idea la explosión de cosas que logra en mi una y otra vez, pero agradezco sus comentarios -tenemos química... algo que en serio, debo tomar justo ahora. Las veré en prácticas- y solo con eso, me safé de momento de su acoso.
me toma doblar un poco algunos pasillos, hacerme con discreción del horario de Parrish y apagar el móvil. Simplemente no deseo ser encontrada, tengo otro objetivo en mente.
Es curioso que el efecto sigue siendo casi el mismo, solo que potenciado, antes tenía mi efecto sobre el estudiantado, ahora en serio me abren paso apenas camino, como Moisés en el mar rojo.
Que es lo que se encuentra el que es capaz de verme? unas piernas bien torneadas, enfundadas en unas delicadas medias oscuras, sobre estas unas botas hasta poco abajo de la rodilla. no llevo tacones esta vez... arruinaría el atuendo. si se sigue por la misma linea, pero en sentido ascendente después de las medias encontrarían más tela, un short de una excelente tela, que me llega a la mitad el muslo, y, para sorpresa de todos, no es ajustado, simplemente insinúa, no exhibe. aquella indumentaria va combinada por blusón ligero y holgado que cae por uno de mis hombros desnudandolo pero sin ser demasiado largo, solo lo justo, de tono claro y que resalta el actuando por completo. Bolso, libros y un peinado, un buen peoinado. Eh dejado un poco el maquillaje dramático. Al menos eso tengo, jamás me eh maquillado como prostituta, eso se los dejo a tantas imitaciones mías.
Siento mi cabello mecerse a la par de mi andar, pareciera que todo estaba bien en mi vida, incluso me doy el lujo de sonreír.. es lo bueno de saber fingir bien, o que se te ha creado una fama de descaro que ni el mismo Merlín pudiese manejar. La vida parece plácida para las descaradas, la fachada es perfecta y te ahorras cualquier tipo de conmiseración y la etapa de victimismo, que honestamente, no me va... o me ha ido nunca.
Por dentro, claro que tengo dudas, inquietudes y temores... muchos temores. el sábado casi morimos, el sábado casi mueren mis dos personas favoritas, esa misma noche, efectivamente mi mejor amigo murió y resucitó sin algún milagro religioso de por medio... y también estaba esto. la necesidad de hablar con Jake Parrish, que, si antes era importante, ahora se me convertía en prioridad. Aún siento algo, pequeñas secuelas, brotes de chispas de lo que antes fue una llamarada... esta ahí y me da temor, Parrish dijo que sucedería y sucedió... el debe tener más respuestas.
Le encuentro entonces y solo bastó una mirada intensa que el pareció entender bien y un gesto para que me siga. no le espero, me importa muy poco que me vean con el o no, es que simplemente el parece ser un lobo solitario, no pretendo quitarle su estatus si tanto le agrada. me quedo en el pasillo y logro que el me siga, quedando del otro y viendo en dirección contraria. no me interesa guardar las apariencias, empero, solo que con este hombre no hay que intentar ser dulce como la miel, cuando lo que le gusta es la hiel.
Al fin habla y simplemente, me parece una broma ¡para que es bueno?... tal vez eso se lo debiera preguntar a la pelinegra, seguro ella tiene muchas mejores referencias, -espero que para más de una cosa- respondo con ligeros toques de burla y coquetería. Perfecto, adoro que la seguridad se me salga desde los poros o el tono de voz. humedezco mis labios y le doy media sonrisa mientras comienzo a buscar entre mis anotaciones, de manera completamente descuidada -pero supongo que eso lo dejaremos como elemento sorpresa- agrego justo antes de pasar de página en mis apuntes. la gente se va alejando de a poco, aun no estamos solos y eso lo complica -sabes que es lo malo de la historia, Parrish?- y antes de que responda agrego -si, todo mundo lo dice, si no se sabe se esta condenado a repetirla... pero que hay de los que quieren aprenderla?... donde buscar lo necesario para saber a que deben enfrentarse?-
Entonces, solo entonces veo a sus ojos y se que el lo entiende, por supuesto que entiende el mensaje, solo ay que ver como sus orbes se contraen y su rictus cambia -tu eres un buen historiador y es por eso que quiero hablar contigo- no espero más y me recargó en uno de esos lockers para finalmente verle sin necesidad de fingir y, más serena y sin actitud de aparente soberbia le confieso -el miedo se siente bien, da poder... pero el poder jamás había sido temido... ahora lo hago y no pienso seguir así.-
Laura Lerman- Mensajes : 226
Fecha de inscripción : 28/10/2011
Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Jue Mar 29, 2012 4:31 pm
¿Eso ha sido una broma o una ironía? ¿Una broma de la rubia adyecta? No, probablemente un sarcasmo...asi y todo sonrio de lado, porque la verdad es que me importa poco la intención del comentario.
- yo también lo espero...aunque no lo creo probable.
La media sonrisa en la cara de la chica de los cabellos dorados y el pésimo gusto para vestir me confirma que quiere algo de mi, o nunca se habría molestado en dirigirme la palabra.
La gente sigue pasando asi que disimulo el hecho de que me encuentro parado en mitad de un pasillo sin hacer nada apoyandome en la pared, cruzando los pies y sacando un cigarro. La gente me mira como si me hubiese vuelto loco, bueno, me he molestado en leer las normas del instituto, todas ellas, y sé que por esto no pueden expulsarme, sólo ponerme una falta grave que tendrían que tratar con la persona responsable de mi, a saber...yo mismo. Ventajas de independizarse a los dieciseis. Lo enciendo y le hago una mueca burlona al que se me queda mirando. Es un tipo enjuto que creo que hace teatro, me suena haberlo visto con Leia alguna vez.
- La historia no tiene nada de malo, lo que ya ha pasado no puede hacerte daño...y siempre está ahí para el que quiera aprender.
La he entendido, por supuesto que sí, y lo cierto es que siento cierto alivio, al menos una se lo toma en serio, la que más me preocupaba, porque los demás, hagan o no hagan, no tendrán nunca el problema añadido de ver en lo que pueden llegar a convertirse si no tienen cuidado.
¿Soy un buen historiador? ¿Por qué todas las chicas guapas creen que con un cumplido o una caida de pestañas estaremos más que dispuestos a ser sus perritos falderos? joder...como me molesta que me tomen el pelo o lo intenten siquiera. Contesto en tono seco mientras le doy otra calada al cigarro, el profesor de mates pasa por mi lado, me mira con inquina, comenta algo a raiz del humo pero no me manda a dirección, este también se ha leido los estatutos, siento un repentino aprecio por él. Al menos sabe leer, en el mundo en que nos toca vivir ya es algo.
- No deberias temerle al poder, deberías temerte a ti misma...eres tú quién decide, todo está en tus manos, sólo tienes que ser lo suficientemente valiente como para hacer lo que se debe, aún cuando ello conlleve hacer sacrificios...
La miro de soslayo, evaluandola un momento, hay decisión en sus ojos, no creo que sea cobarde, pero...¿autocontrol una animadora? Creo que estamos jodidos...
- Trabajo en la gasolinera al salir de clase...salgo a las nueve. Enfrente hay un pub un tanto cutre, tienes que bajar unas escaleras, se llama "el metro", no puedes perderte, esperame allí a las nueve y cuarto...es basicamente para obreros y camioneros, nadie nos verá alli, no queremos destrozar tu reputación ahora que empiezas a tener una.
No espero respuesta, asi que apago el pitillo, miro la hora, con suerte aún llego a clase, tarde, pero llego. La miro de nuevo al pasar y le digo antes de irme en tono serio.
- No quiero a tu novio merodeando, o vienes sola o no vienes...
- yo también lo espero...aunque no lo creo probable.
La media sonrisa en la cara de la chica de los cabellos dorados y el pésimo gusto para vestir me confirma que quiere algo de mi, o nunca se habría molestado en dirigirme la palabra.
La gente sigue pasando asi que disimulo el hecho de que me encuentro parado en mitad de un pasillo sin hacer nada apoyandome en la pared, cruzando los pies y sacando un cigarro. La gente me mira como si me hubiese vuelto loco, bueno, me he molestado en leer las normas del instituto, todas ellas, y sé que por esto no pueden expulsarme, sólo ponerme una falta grave que tendrían que tratar con la persona responsable de mi, a saber...yo mismo. Ventajas de independizarse a los dieciseis. Lo enciendo y le hago una mueca burlona al que se me queda mirando. Es un tipo enjuto que creo que hace teatro, me suena haberlo visto con Leia alguna vez.
- La historia no tiene nada de malo, lo que ya ha pasado no puede hacerte daño...y siempre está ahí para el que quiera aprender.
La he entendido, por supuesto que sí, y lo cierto es que siento cierto alivio, al menos una se lo toma en serio, la que más me preocupaba, porque los demás, hagan o no hagan, no tendrán nunca el problema añadido de ver en lo que pueden llegar a convertirse si no tienen cuidado.
¿Soy un buen historiador? ¿Por qué todas las chicas guapas creen que con un cumplido o una caida de pestañas estaremos más que dispuestos a ser sus perritos falderos? joder...como me molesta que me tomen el pelo o lo intenten siquiera. Contesto en tono seco mientras le doy otra calada al cigarro, el profesor de mates pasa por mi lado, me mira con inquina, comenta algo a raiz del humo pero no me manda a dirección, este también se ha leido los estatutos, siento un repentino aprecio por él. Al menos sabe leer, en el mundo en que nos toca vivir ya es algo.
- No deberias temerle al poder, deberías temerte a ti misma...eres tú quién decide, todo está en tus manos, sólo tienes que ser lo suficientemente valiente como para hacer lo que se debe, aún cuando ello conlleve hacer sacrificios...
La miro de soslayo, evaluandola un momento, hay decisión en sus ojos, no creo que sea cobarde, pero...¿autocontrol una animadora? Creo que estamos jodidos...
- Trabajo en la gasolinera al salir de clase...salgo a las nueve. Enfrente hay un pub un tanto cutre, tienes que bajar unas escaleras, se llama "el metro", no puedes perderte, esperame allí a las nueve y cuarto...es basicamente para obreros y camioneros, nadie nos verá alli, no queremos destrozar tu reputación ahora que empiezas a tener una.
No espero respuesta, asi que apago el pitillo, miro la hora, con suerte aún llego a clase, tarde, pero llego. La miro de nuevo al pasar y le digo antes de irme en tono serio.
- No quiero a tu novio merodeando, o vienes sola o no vienes...
Jake Parrish- Admin
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Vie Mar 30, 2012 3:58 am
-encantada- respondí a todas sus indicaciones, no podría responder mas de todas formas cuando el ya se iba. me di la media vuelta y suspiré poniendo os ojos en blanco, si no fuera porque de verdad necesitaba entender lo que pasaba, no me tomaría la molestia de escuchar el discurso de disney, pareciendo la moraleja de alguna de sus películas "valor de hacer lo correcto, esta en ti" si, claro... todo esta en el corazón, no? un poco más y podría haber jurado ver a bamby andar por los pasillos.
Como fuere, seguí en apariencia en lo mio, que básicamente consistió en clases, Alek, entrenamiento y paseo con el uniforme de las porristas, Alex y unas ligeras mallugaduras. Al menos eso tendría su ventaja, no me estaba viendo como acostumbrábamos Alex y yo, las razones básicas de siempre. Benjamín de repente, recordó que su hija se viste actua y piensa como una zorra. El desenlace fue el mismo donde tendría que esperar a que los moretones desaparecieran antes de poder estar a solas con Alex, al menos con ese tipo de soledad en el que todo se transforma en pasión.
La chicas querían trabajar en una nueva rutina, por ende Alex termino mucho antes que yo, dándome mi espacio y también la entera libertad para irme en directo desde la práctica a ese pub. No tuve demasiado para cambiarme, si acaso colocarme una chaqueta para no pescar el frió. Sin embargo llegaría soberanamente temprano, al menos media hora, según el reloj de pared.
No, no había mentido Parrish, el lugar no era el mejor, pero que me importaba? Si tenía miradas sobre mi hice caso omiso, es lo bueno, empero de ser una descarada, muchas cosas simplemente no interesan, menos cuando se tiene un objetivo.
Al final, llegó un poco tarde, pero no le fue difícil localizarme. El chiste de las rubias ya me lo sabía... pero las rubias seguimos siendo las que nos divertimos más. Gracias, Marilyn Monroe.
-Pues yo creo que te vez bastante bien- decido como saludo, sacudiendo mi cabello y bebiendo un poco de mi cerveza. frente a mi asiento hay otras tantas bebidas más, cortejan de los amables camioneros y porque no? unas cuantas cervezas ás pedidas por mi cuenta. -bebe algo, por favor... y tranquilo, no estoy interesada en conquistarte- y entonces, sonreí de lado recordando el hecho -pero creo que tu tampoco, así que esto lo vuelve realmente sencillo-
Como fuere, seguí en apariencia en lo mio, que básicamente consistió en clases, Alek, entrenamiento y paseo con el uniforme de las porristas, Alex y unas ligeras mallugaduras. Al menos eso tendría su ventaja, no me estaba viendo como acostumbrábamos Alex y yo, las razones básicas de siempre. Benjamín de repente, recordó que su hija se viste actua y piensa como una zorra. El desenlace fue el mismo donde tendría que esperar a que los moretones desaparecieran antes de poder estar a solas con Alex, al menos con ese tipo de soledad en el que todo se transforma en pasión.
La chicas querían trabajar en una nueva rutina, por ende Alex termino mucho antes que yo, dándome mi espacio y también la entera libertad para irme en directo desde la práctica a ese pub. No tuve demasiado para cambiarme, si acaso colocarme una chaqueta para no pescar el frió. Sin embargo llegaría soberanamente temprano, al menos media hora, según el reloj de pared.
No, no había mentido Parrish, el lugar no era el mejor, pero que me importaba? Si tenía miradas sobre mi hice caso omiso, es lo bueno, empero de ser una descarada, muchas cosas simplemente no interesan, menos cuando se tiene un objetivo.
Al final, llegó un poco tarde, pero no le fue difícil localizarme. El chiste de las rubias ya me lo sabía... pero las rubias seguimos siendo las que nos divertimos más. Gracias, Marilyn Monroe.
-Pues yo creo que te vez bastante bien- decido como saludo, sacudiendo mi cabello y bebiendo un poco de mi cerveza. frente a mi asiento hay otras tantas bebidas más, cortejan de los amables camioneros y porque no? unas cuantas cervezas ás pedidas por mi cuenta. -bebe algo, por favor... y tranquilo, no estoy interesada en conquistarte- y entonces, sonreí de lado recordando el hecho -pero creo que tu tampoco, así que esto lo vuelve realmente sencillo-
Laura Lerman- Mensajes : 226
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Vie Mar 30, 2012 1:32 pm
Cuatro horas de trabajo, media jornada, que le llaman, contando con que la mañana entera la paso en clases lo mío podría llamarse jornada completa, y no es como si al salir pudiese irme a la cama directamente, no, eso nunca...luego me preguntan por qué estoy todo el día de mala leche...probasen a dormir lo que yo duermo y pasarse el día entre deberes y surtidores.
La veo pasar mientras atiendo a un fulano con graves problemas de alimentación, como para no verla, tres silbidos abruptos la situan al paso, hago una mueca y vuelvo a lo mío tras mirar el relog, llega pronto, no voy a darme prisa, yo le dije a y cuarto. El tipo con sobrepeso me pregunta algo, pretende ser gracioso. No me pagan por fingir que tiene gracia, eso las chicas de compañia, yo sólo pongo gasolina. No parece muy contento con la atención, tampoco es que en mi trabajo den propinas, asi que...
Al terminar el turno me paso por el despecho, me pagan lo que me deben de la semana pasada, es un alivio, porque lo de la camisa del otro día me jodió el presupuesto y necesito hacer la compra básica pronto. Me cambio de ropa y me lavo un poco para sacar las manchas de grasa. Es lo peor del curro, odio el olor.
No es dificil de encontrar una vez en el pub. Es la unica estudiante del bar. Hay otras mujeres, pero más mayores y, por mucho que le disguste reconocerlo a la rubia, mucho mas experimentadas. No me preocupo por saludar, no conozco a nadie allí, sólo entro alguna vez para tomarme una caña después del trabajo y no me relaciono.
La primera frase que me dirige mientras me siento me hace alzar las cejas. ¿cortesía? Prefería un hola y andando. En cuanto dice que beba algo me fijo en la cantidad de copas en la mesa, tres cervezas vacías, un botellín en sus manos y varias copas llenas.
- ¿Esperas a alguien más o es que has oido que el alcohol conserva e intentas ahorrar en liposucciones cuando crezcas?
Ninguna de las copas en mesa me apetecen asi que llamo a la camarera al pasar y le pido una guiness con educación.
No estoy interesada en conquistarte dice, y me sale una mueca que bien podría ser una risa.
- Tampoco es como si pudieses...
Se me escapa aún antes de que siga hablando. La miro. Parece estar en su salsa, aún cuando la mitad del bar está hablando sobre ella y la otra mitad probablemente imaginandola desnuda, creo que lo sabe. Me admira que estas pedorras pijas consigan tal cantidad de autoestima, supongo que el conseguir siempre lo que se quiere a base de talonario ayuda.
Cuando admite en voz alta que asume que no tengo el más minimo interés romántico o sexual en ella se me escapa una sonrisa queda.
- Bien...ya que tenemos claro que ninguno de los dos está ni levemente interesado en sacarle los pantalones al otro...¿podemos ir al grano?...entiendo que tú tienes todo el tiempo del mundo, pero verás, el mío es excaso...aún tengo que ponerme a estudiar para el examen de mañana...te lo pondré fácil, tú me dices lo que quieres saber y yo luego te cuento lo que considere conveniente...
No parece muy conforme y entrecierra los ojos, pero parece pensar un momento la respuesta mientras me evalua. ¿qué pasa? Al menos no le miento, podría decirle que le diré la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad y quedarme tan ancho, aunque mintiese. Hay cosas que es mejor que averigue por si misma.
- No le has dicho a nadie que venías, ¿no?- si se me nota levemente preocupado no es por ella, es que estoy harto de explicar que no me gustan las rubias- ¿ya has dejado a ese novio de revista tuyo?
La veo pasar mientras atiendo a un fulano con graves problemas de alimentación, como para no verla, tres silbidos abruptos la situan al paso, hago una mueca y vuelvo a lo mío tras mirar el relog, llega pronto, no voy a darme prisa, yo le dije a y cuarto. El tipo con sobrepeso me pregunta algo, pretende ser gracioso. No me pagan por fingir que tiene gracia, eso las chicas de compañia, yo sólo pongo gasolina. No parece muy contento con la atención, tampoco es que en mi trabajo den propinas, asi que...
Al terminar el turno me paso por el despecho, me pagan lo que me deben de la semana pasada, es un alivio, porque lo de la camisa del otro día me jodió el presupuesto y necesito hacer la compra básica pronto. Me cambio de ropa y me lavo un poco para sacar las manchas de grasa. Es lo peor del curro, odio el olor.
No es dificil de encontrar una vez en el pub. Es la unica estudiante del bar. Hay otras mujeres, pero más mayores y, por mucho que le disguste reconocerlo a la rubia, mucho mas experimentadas. No me preocupo por saludar, no conozco a nadie allí, sólo entro alguna vez para tomarme una caña después del trabajo y no me relaciono.
La primera frase que me dirige mientras me siento me hace alzar las cejas. ¿cortesía? Prefería un hola y andando. En cuanto dice que beba algo me fijo en la cantidad de copas en la mesa, tres cervezas vacías, un botellín en sus manos y varias copas llenas.
- ¿Esperas a alguien más o es que has oido que el alcohol conserva e intentas ahorrar en liposucciones cuando crezcas?
Ninguna de las copas en mesa me apetecen asi que llamo a la camarera al pasar y le pido una guiness con educación.
No estoy interesada en conquistarte dice, y me sale una mueca que bien podría ser una risa.
- Tampoco es como si pudieses...
Se me escapa aún antes de que siga hablando. La miro. Parece estar en su salsa, aún cuando la mitad del bar está hablando sobre ella y la otra mitad probablemente imaginandola desnuda, creo que lo sabe. Me admira que estas pedorras pijas consigan tal cantidad de autoestima, supongo que el conseguir siempre lo que se quiere a base de talonario ayuda.
Cuando admite en voz alta que asume que no tengo el más minimo interés romántico o sexual en ella se me escapa una sonrisa queda.
- Bien...ya que tenemos claro que ninguno de los dos está ni levemente interesado en sacarle los pantalones al otro...¿podemos ir al grano?...entiendo que tú tienes todo el tiempo del mundo, pero verás, el mío es excaso...aún tengo que ponerme a estudiar para el examen de mañana...te lo pondré fácil, tú me dices lo que quieres saber y yo luego te cuento lo que considere conveniente...
No parece muy conforme y entrecierra los ojos, pero parece pensar un momento la respuesta mientras me evalua. ¿qué pasa? Al menos no le miento, podría decirle que le diré la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad y quedarme tan ancho, aunque mintiese. Hay cosas que es mejor que averigue por si misma.
- No le has dicho a nadie que venías, ¿no?- si se me nota levemente preocupado no es por ella, es que estoy harto de explicar que no me gustan las rubias- ¿ya has dejado a ese novio de revista tuyo?
Jake Parrish- Admin
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Fecha de inscripción : 28/10/2011
Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Dom Abr 01, 2012 2:42 am
"tampoco es como si pudieses"
Sonreí de forma ladeada, bien,... podría contestarle que eso podría verse, aún no había fallado ningún objetivo, pero, justamente no tenía objeto, tenía a alguien a mi lado y era soberanamente estúpido el pensar en intentar pintarle los cuernos por ese... Parrish, por ser amable.
Al escucharle primero arquee la ceja, después fruncí el entrecejo. El hombre no tenía sentido de nada, ni común ni de lo que pudo ser al menos la mejor de mis caras. Vemos.. quien llevaba un mes vigilándome? UN MES y no cualquier cosa, miradas y demás, lo sabía, incluso podía sentirlo observarme, o porque no, velar afuera de casa (mi casa, que obvio no podría denominarlo hogar) y ahora simplemente me limitaba en minutos.
Decidí no demorarme más en el lugar, pasó de las bebidas, yo simplemente me encogí de hombros y juguetee con la boca de la botella -claro, no hay tiempo, ni siquiera para acosar... o es que debo denominarlo de alguna otra manera?- y la risa se me vino a los labios, tenía razón ello -que tal otra oferta, yo pregunto, tu me respondes como debiera ser y no solo lo que consideres conveniente.- hice una pausa y cambie el tono de mis palabras, solo un poco -ni siquiera se cual es el tipo de veto que tienes para de repente filtrar la información... se supone que eso queremos, no? información, porque la información es poder-
Pareció sentirse sorprendido, o al menos eso reflejo su cara que con tan pocas expresiones contaba, se iba de inexpresivo a ligeramente indiferente y de ahí a frígido, eso era todo.
-no le eh dicho a nadie, fue lo que pediste, y si lo pides, lo tienes, siempre y cuando reciba a cambio la misma cortesía- respondí con sinceridad a esto ultimo. el tiempo pasaba y sus deberes inexorables se demorarían.. así que me decanté por lo simple
-tu y yo somos diferentes a los demás y ya me lo explicaste, un poco la noche de la cabaña, pero hay mucho más, evitaré preguntar el que es porque no me dirás nada, así que yo hago frases tu las afirmas o las niegas y si las niegas, me darás la respuesta. no hay negociación en ello-
le di un trago más a la cerveza antes de dejarla sobre la mesa
-no hay parentesco entre nosotros- el afirmo ello y al menos eso me hacía sentir mejor, bien, la sangre no nos unía, nos unía otra cosa.
-te metes en mis sueños por malsana diversión, como si no fuera suficiente verme andar cada de cinco, es molesto, sabes? si no fuera Alexander quien es, yo misma te habría partido en dos- y ahí increpo un poco, bueno.. al menos sabía defenderse.
La tercer pregunta fue más interesante -la belleza en la oscuridad.. es algo que siempre he tenido eso en mente desde la cabaña.. oscuridad, ese s el poder?... magia negra?-
Sonreí de forma ladeada, bien,... podría contestarle que eso podría verse, aún no había fallado ningún objetivo, pero, justamente no tenía objeto, tenía a alguien a mi lado y era soberanamente estúpido el pensar en intentar pintarle los cuernos por ese... Parrish, por ser amable.
Al escucharle primero arquee la ceja, después fruncí el entrecejo. El hombre no tenía sentido de nada, ni común ni de lo que pudo ser al menos la mejor de mis caras. Vemos.. quien llevaba un mes vigilándome? UN MES y no cualquier cosa, miradas y demás, lo sabía, incluso podía sentirlo observarme, o porque no, velar afuera de casa (mi casa, que obvio no podría denominarlo hogar) y ahora simplemente me limitaba en minutos.
Decidí no demorarme más en el lugar, pasó de las bebidas, yo simplemente me encogí de hombros y juguetee con la boca de la botella -claro, no hay tiempo, ni siquiera para acosar... o es que debo denominarlo de alguna otra manera?- y la risa se me vino a los labios, tenía razón ello -que tal otra oferta, yo pregunto, tu me respondes como debiera ser y no solo lo que consideres conveniente.- hice una pausa y cambie el tono de mis palabras, solo un poco -ni siquiera se cual es el tipo de veto que tienes para de repente filtrar la información... se supone que eso queremos, no? información, porque la información es poder-
Pareció sentirse sorprendido, o al menos eso reflejo su cara que con tan pocas expresiones contaba, se iba de inexpresivo a ligeramente indiferente y de ahí a frígido, eso era todo.
-no le eh dicho a nadie, fue lo que pediste, y si lo pides, lo tienes, siempre y cuando reciba a cambio la misma cortesía- respondí con sinceridad a esto ultimo. el tiempo pasaba y sus deberes inexorables se demorarían.. así que me decanté por lo simple
-tu y yo somos diferentes a los demás y ya me lo explicaste, un poco la noche de la cabaña, pero hay mucho más, evitaré preguntar el que es porque no me dirás nada, así que yo hago frases tu las afirmas o las niegas y si las niegas, me darás la respuesta. no hay negociación en ello-
le di un trago más a la cerveza antes de dejarla sobre la mesa
-no hay parentesco entre nosotros- el afirmo ello y al menos eso me hacía sentir mejor, bien, la sangre no nos unía, nos unía otra cosa.
-te metes en mis sueños por malsana diversión, como si no fuera suficiente verme andar cada de cinco, es molesto, sabes? si no fuera Alexander quien es, yo misma te habría partido en dos- y ahí increpo un poco, bueno.. al menos sabía defenderse.
La tercer pregunta fue más interesante -la belleza en la oscuridad.. es algo que siempre he tenido eso en mente desde la cabaña.. oscuridad, ese s el poder?... magia negra?-
Laura Lerman- Mensajes : 226
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Lun Abr 02, 2012 4:27 am
La expresión de su cara, que va cambiando a medida que hablo, me deja una idea vaga de lo que andará pensando, pero me gusta ver cómo se come el coco la gente asi que observo pero no digo niente. Podría explicarle que no es nada personal, que no me gustan las mujeres en general, sólo algunas en particular, muy particular. Pero no tendría caso, no pretendo caerle bien o convertirme en su amiguito, sólo que no mate a nadie, y a ser posible, no se muera tampoco. Aunque lo último es opcional.
Acosarla...¿yooooooo? Ahí debo protestar.
- No confundamos términos rubia...yo no te acoso, más bien te sigo a una distancia prudencial para asegurarme de que no la cagas del todo...soy algo asi como tu guardaespaldas, deberías agradecermelo...
No me pasa desapercibido que cada vez que la llamo "rubia" hace una mueca.
- ¿te molesta que te llame rubia?- pregunto, divertido- es tu color de pelo, no un apodo...a lo mejor deberías teñirtelo si te molesta tanto...
Ella habla, yo ya no la escucho, me traen la cerveza, la tomo, paso del vaso y le doy un sorbo o dos antes de encender un cigarro, dejo que acabe antes de mirarla por encima de la mesa y estirarme en la silla con la cerveza en la mano.
- no es negociable, pero si lo prefieres te miento...al parecer es lo que os va más...ah, no, que vosotros lo llamais educación...muy bien, educadamente te digo que claro, que si, que tú preguntas y yo contesto la verdad, toda la verda y nada más que la verdad...
La sonrisa felina y sarcastica sale sola y dice todo lo que hay que saber.
- ah, el poder...puede ser...pero dejando a un lado mis intenciones, mis razones son mías y no las comparto con nadie...estás aqui por ti, no por mi, así que no me jodas...
Muy bien. Lo de responderle si o no no me parece tan mala idea, así que sólo contesto cuando afirma. ¿Parientes? ¿nosotros?
- iuuuuuu...no...ya estamos pensando poco y tergiversando más, me gusta tanto meterme en tus sueños como a ti recibirme, para empezar no pego ojo, linda. Por desgracia no siempre puedo controlarlo.
Al fin hace una pregunta con sentido, ya empezaba a creer que la próxima sería del tipo ¿ves el futuro? ¿me casaré con el ken maravillo? Animadoras...
- Si, es magia negra lo que corre por tus venas, y se remonta a muy antiguo, y si, es eso lo que compartimos, también es peligroso, esa sensación...es como una droga, y cuanto más la pruebas más dificil es parar, puede corromperte...también es peligroso por otro smotivos, pero esos es mejor que los veamos poco a poco...deberías practicar y aprender a controlarlo, todos deberían practicr, pero tú más que nadie, ellos no perderán el control, pero tú puedes hacerlo, y eso no sería bueno para nadie...por eso te sigo.
Acosarla...¿yooooooo? Ahí debo protestar.
- No confundamos términos rubia...yo no te acoso, más bien te sigo a una distancia prudencial para asegurarme de que no la cagas del todo...soy algo asi como tu guardaespaldas, deberías agradecermelo...
No me pasa desapercibido que cada vez que la llamo "rubia" hace una mueca.
- ¿te molesta que te llame rubia?- pregunto, divertido- es tu color de pelo, no un apodo...a lo mejor deberías teñirtelo si te molesta tanto...
Ella habla, yo ya no la escucho, me traen la cerveza, la tomo, paso del vaso y le doy un sorbo o dos antes de encender un cigarro, dejo que acabe antes de mirarla por encima de la mesa y estirarme en la silla con la cerveza en la mano.
- no es negociable, pero si lo prefieres te miento...al parecer es lo que os va más...ah, no, que vosotros lo llamais educación...muy bien, educadamente te digo que claro, que si, que tú preguntas y yo contesto la verdad, toda la verda y nada más que la verdad...
La sonrisa felina y sarcastica sale sola y dice todo lo que hay que saber.
- ah, el poder...puede ser...pero dejando a un lado mis intenciones, mis razones son mías y no las comparto con nadie...estás aqui por ti, no por mi, así que no me jodas...
Muy bien. Lo de responderle si o no no me parece tan mala idea, así que sólo contesto cuando afirma. ¿Parientes? ¿nosotros?
- iuuuuuu...no...ya estamos pensando poco y tergiversando más, me gusta tanto meterme en tus sueños como a ti recibirme, para empezar no pego ojo, linda. Por desgracia no siempre puedo controlarlo.
Al fin hace una pregunta con sentido, ya empezaba a creer que la próxima sería del tipo ¿ves el futuro? ¿me casaré con el ken maravillo? Animadoras...
- Si, es magia negra lo que corre por tus venas, y se remonta a muy antiguo, y si, es eso lo que compartimos, también es peligroso, esa sensación...es como una droga, y cuanto más la pruebas más dificil es parar, puede corromperte...también es peligroso por otro smotivos, pero esos es mejor que los veamos poco a poco...deberías practicar y aprender a controlarlo, todos deberían practicr, pero tú más que nadie, ellos no perderán el control, pero tú puedes hacerlo, y eso no sería bueno para nadie...por eso te sigo.
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Lun Abr 02, 2012 8:23 am
Con honestidad estaba hasta la madre de Parrish y de su cara de idiota insatisfecho, porque cada palabra simplemente estaba hecha para sentirse superior, mejor que los demás intentando humillar en el proceso. Que es lo que quería? que rogase "no me dejes" o algo así? por favor, estaba hablando con la bruja mayor, la perra, la zorra, la perdida y la peor, aún no había batalla que una vez puesta en marcha no ganara y el no lo sabía pero me aseguraría que lo supiera y pronto si continuaba así.
El hablaba con ese tinte de superioridad, claro, como si por ser rubia pudiera ser un blanco claro para sus comentarios ácidos. en ese momento le odie, no en demasía porque ara odiar había que ser importante y el no lo era, si acaso un montículo de información que necesitaba. No deseaba ser su amiguita y si a este hombre no le iban los buenos tratos, pero ara el y mejor para mi.
-me gusta mi tono, muchas gracias, es solo que.... sabes cuan desagradable es que un imbécil intente jugar a ser superior?... porque yo estoy viendo uno justo ahroa- arquee una ceja y sonreí con cinismo. si el me ignoraba en lo que decía, y en realidad me estaba ignorando, nuevamente le devolvería el favor.
Ignoré su comentario de los modales, no es que los míos fuesen perfectos pero acababa de entender que el sujeto simplemente estaba traumado por ellos o su falta de ellos, nuevamente, demostrándose inferior aun cuando hasta el momento, nadie le había clasificado así.. pero ya que en esas íbamos....
Los grandes egos pueden caer con tanta facilidad... sobre todo aquellos que están huecos y mal fundados y este nene tenía todas las cartas para ser derrocado. lo haría yo?... tal vez, de momento simplemente me interesaba un objetivo; saber que es lo que pasaba de una buena vez, de una maldita vez.
Y lo escuche. Nagia negra. Sorprendida? ni un poco; el concepto era pesado si, pero la posibilidad ya había estado en mi mente. No puse cara de terror, tampoco titubee un solo atisbo. a cambio. dejé la cerveza de lado humedecí mis labios y la primer bebida de cortesía, o al menos la más cercana que se encontraba fue tomada pro mis dedos y después lentamente degustada para después cruzar mis piernas con una calculada gloria -así que se hereda... interesante- y le di otra bebida a ese trago, una mala elección, ni siquiera tenía tanto alcohol como cualquiera desearía.
Entonces me digné a ver su rostro y ver sus ojos, hurgar en ellos ya que el hurgaba en mis sueños, la conexión no era unilateral después de todo. Se que no puedo lograr mucho pero al menos se que no me estaba mintiendo, también de que iba enserio, por primera vez.
No uve que pensarlo demasiado. -cuando empiezo y por donde empiezo...y no me digas que es buscando mi libro, porque el demonio mismo sabe que no esta en mi casa- y hablando del demonio....
en la puerta estaba el chico rudo de el instituto, todo mundo lo catalogaba así y lo cierto era que aunque fuese rudo, por lo general era ma´s elitista en cuanto a sus gustos para tomar algo. Alex también le conocía y mucho más, eran amigos.
Conociéndole jamás habría puesto un pie aquí, estaba segura, y ni si quiera vestía como generalmente acostumbraba... sería que quería pasar desapercibido o es que simplemente tenía una doble vida. Algo que simplemente no me interesaba, solo que no lo hiciera saber.
Vi la oportunidad ahí mismo -que es lo que puedo y no puedo hacer?- interrogué una vez más a el castaño que tenía enfrente -solo si lo deseo, cierto?.. eso aplica a lograr que cualquiera que yo elija, haga algo o deje de hacer algo según mis deseos?- Parrish iba a hablar pero le detuve -tengo mi objetivo, a menos que venga a buscarte a ti... pero si no, se lo que quiero hacer, justo ahora- y ya estaba, sin miedos, nunca más.. poder.. quien no quería poder, el poder siempre tenía peligros pero si ya estaba en mi por un demonio, dejaría de temerle, justo ahora.
El hablaba con ese tinte de superioridad, claro, como si por ser rubia pudiera ser un blanco claro para sus comentarios ácidos. en ese momento le odie, no en demasía porque ara odiar había que ser importante y el no lo era, si acaso un montículo de información que necesitaba. No deseaba ser su amiguita y si a este hombre no le iban los buenos tratos, pero ara el y mejor para mi.
-me gusta mi tono, muchas gracias, es solo que.... sabes cuan desagradable es que un imbécil intente jugar a ser superior?... porque yo estoy viendo uno justo ahroa- arquee una ceja y sonreí con cinismo. si el me ignoraba en lo que decía, y en realidad me estaba ignorando, nuevamente le devolvería el favor.
Ignoré su comentario de los modales, no es que los míos fuesen perfectos pero acababa de entender que el sujeto simplemente estaba traumado por ellos o su falta de ellos, nuevamente, demostrándose inferior aun cuando hasta el momento, nadie le había clasificado así.. pero ya que en esas íbamos....
Los grandes egos pueden caer con tanta facilidad... sobre todo aquellos que están huecos y mal fundados y este nene tenía todas las cartas para ser derrocado. lo haría yo?... tal vez, de momento simplemente me interesaba un objetivo; saber que es lo que pasaba de una buena vez, de una maldita vez.
Y lo escuche. Nagia negra. Sorprendida? ni un poco; el concepto era pesado si, pero la posibilidad ya había estado en mi mente. No puse cara de terror, tampoco titubee un solo atisbo. a cambio. dejé la cerveza de lado humedecí mis labios y la primer bebida de cortesía, o al menos la más cercana que se encontraba fue tomada pro mis dedos y después lentamente degustada para después cruzar mis piernas con una calculada gloria -así que se hereda... interesante- y le di otra bebida a ese trago, una mala elección, ni siquiera tenía tanto alcohol como cualquiera desearía.
Entonces me digné a ver su rostro y ver sus ojos, hurgar en ellos ya que el hurgaba en mis sueños, la conexión no era unilateral después de todo. Se que no puedo lograr mucho pero al menos se que no me estaba mintiendo, también de que iba enserio, por primera vez.
No uve que pensarlo demasiado. -cuando empiezo y por donde empiezo...y no me digas que es buscando mi libro, porque el demonio mismo sabe que no esta en mi casa- y hablando del demonio....
en la puerta estaba el chico rudo de el instituto, todo mundo lo catalogaba así y lo cierto era que aunque fuese rudo, por lo general era ma´s elitista en cuanto a sus gustos para tomar algo. Alex también le conocía y mucho más, eran amigos.
Conociéndole jamás habría puesto un pie aquí, estaba segura, y ni si quiera vestía como generalmente acostumbraba... sería que quería pasar desapercibido o es que simplemente tenía una doble vida. Algo que simplemente no me interesaba, solo que no lo hiciera saber.
Vi la oportunidad ahí mismo -que es lo que puedo y no puedo hacer?- interrogué una vez más a el castaño que tenía enfrente -solo si lo deseo, cierto?.. eso aplica a lograr que cualquiera que yo elija, haga algo o deje de hacer algo según mis deseos?- Parrish iba a hablar pero le detuve -tengo mi objetivo, a menos que venga a buscarte a ti... pero si no, se lo que quiero hacer, justo ahora- y ya estaba, sin miedos, nunca más.. poder.. quien no quería poder, el poder siempre tenía peligros pero si ya estaba en mi por un demonio, dejaría de temerle, justo ahora.
Laura Lerman- Mensajes : 226
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Mar Abr 03, 2012 10:25 pm
- Pues deja de mirarte al espejo, rubia, que estamos hablando y es de mala educación...
Y le sonrío, porque en el fondo me hace gracia el comentario. Aunque la niñata no sepa ni de qué árbol está parada tiene coraje para intentar saltar al menos, es algo que soy capaz de valorar.
Niego con la cabeza, apesadumbrado cuando afirma que no ha encontrado el libro aún, esperaba que ya lo tuviese, necesito ese libro, hay muchas cosas que no sé todavía, muchas que necesito saber y que no están en el mío. Por afinidad el suyo es el más probable. Pero me resigno a trabajar con lo que tenemos, es algo que a los ciudadanos de a pie se nos da bien.
- Aqui tienes.
Le tiendo el mío, fue mi intención dejarselo el día de la cabaña, pero la cosa se torció y ya no me acordé más hasta hoy, de paso le dejo también un pack de fotocopias sacadas de la biblioteca municipal y la asociación de historia local.
- La historia de tu familia es muy interesante...deberías empezar por ahí...
Pero me encojo de hombros al decirlo, porque dudo que la chica me haga caso aún cuando debería, por el bien de su querido quaterback.
Y de repente mira a la puerta y su actitud cambia. No me mola nada que resulte imprevisible, con lo que conlleva mejor que fuese Leia y no ella la que ostentase el poder, pero, claro, no nos han preguntado.
- ¿Parezco un puto oraculo?- contesto de mal humor al preguntarme qué puede y qué no. ¿Es que tengo cara de onisciente?- la manipulación mental no es tan fácil y está mal, guapa, es moralmente cuestionable como poco....
¿Pero me hace caso? No. Niego con la cabeza, esto es lo que me molesta de que una panda pijos acaben siendo mi circulo. ¿Donde cojones quedan los principios? Que no digo yo que en caso de necesidad no podamos saltarnos alguno, pero en un bar, sin más para divertir a una rubia con más tetas que cerebro...pues no lo veo...
Mis palabras, sin embargo, no llegan a sus oidos, al parecer. Además de rubia, sorda. Genial...
Y le sonrío, porque en el fondo me hace gracia el comentario. Aunque la niñata no sepa ni de qué árbol está parada tiene coraje para intentar saltar al menos, es algo que soy capaz de valorar.
Niego con la cabeza, apesadumbrado cuando afirma que no ha encontrado el libro aún, esperaba que ya lo tuviese, necesito ese libro, hay muchas cosas que no sé todavía, muchas que necesito saber y que no están en el mío. Por afinidad el suyo es el más probable. Pero me resigno a trabajar con lo que tenemos, es algo que a los ciudadanos de a pie se nos da bien.
- Aqui tienes.
Le tiendo el mío, fue mi intención dejarselo el día de la cabaña, pero la cosa se torció y ya no me acordé más hasta hoy, de paso le dejo también un pack de fotocopias sacadas de la biblioteca municipal y la asociación de historia local.
- La historia de tu familia es muy interesante...deberías empezar por ahí...
Pero me encojo de hombros al decirlo, porque dudo que la chica me haga caso aún cuando debería, por el bien de su querido quaterback.
Y de repente mira a la puerta y su actitud cambia. No me mola nada que resulte imprevisible, con lo que conlleva mejor que fuese Leia y no ella la que ostentase el poder, pero, claro, no nos han preguntado.
- ¿Parezco un puto oraculo?- contesto de mal humor al preguntarme qué puede y qué no. ¿Es que tengo cara de onisciente?- la manipulación mental no es tan fácil y está mal, guapa, es moralmente cuestionable como poco....
¿Pero me hace caso? No. Niego con la cabeza, esto es lo que me molesta de que una panda pijos acaben siendo mi circulo. ¿Donde cojones quedan los principios? Que no digo yo que en caso de necesidad no podamos saltarnos alguno, pero en un bar, sin más para divertir a una rubia con más tetas que cerebro...pues no lo veo...
Mis palabras, sin embargo, no llegan a sus oidos, al parecer. Además de rubia, sorda. Genial...
Jake Parrish- Admin
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Mar Abr 03, 2012 11:23 pm
-si fueras mi puto oráculo créeme, pediría un reembolso- sin embargo no lo vi a el, Pero el no ver no implica no escuchar y entender, estaba molesto. Agradecía, claro el libro y las copias que sencillamente no sabía de que versaban. Lo averiguaría sin embargo... pronto.
La cosa era esta. Todo mundo dice que el conocimiento es poder y pudieran estar en lo correcto, sin embargo era un poder limitado. toque su libro y recordé en el momento la peineta de mi madre -entonces deberías investigar que es lo que se dice de mi- "moralmente cuestionable... como no, esto era para salvarnos el pellejo, o tal vez no, pero era una simple cortesía, si el había pedido que nadie nos viese no tenía ningún inconveniente y el chico alto fornido y maldito ya nos había visto, dado que tenía la vista clavada sobre la nuca de Parrish.
El conocimiento no es poder. EL PODER ES EL PODER, y no hay más, el que tiene poder avasalla en un solo segundo. podrían hacer lo mismo los que solo se conformaban con conocimiento?
Me concentré en el chico, podría, sabía que podría o al menos eso intentaría. Solo que pasaba que no sabía como, las cosas que podía haber hecho antes sola no las planee y esta vez era diferente, además que no estaba Alex, para lograr las cosas más fuertes.
No supe definir el tiempo, el blando era sencillo pero el blanco si acaso de repente tenía sus ojos en mi. Me concentré más formándolo en mi mente, lo que quería, lo que necesitaba, solo que se olvidase de mi en ese momento y saliera del lugar, no era demasiado... que no recordara incluso haber ido al bar, y que si regresaba, fuera después de un momento. Pero Parrish sin embargo parecía no negármelo, no ahora... parrish.
Sin dejar de ver al chico, y sin pedir permiso tome la muñeca de Parrish. La conexión fue inmediata y supe que hacer. Una sonrisa se dibujó en mis labios antes de humedecerlo y sentí como la energía fue directa a su pecho, y como de l pecho le subió a la mente. Era mío... lo que yo quisiera lo tendría, pero también sentí la molestia de Parrish en eso, así que simplemente me limité a que se olvidara de nosotros en ese momento en especifico, fue como poner un parche, algo nebuloso en sus recuerdos que no le permitieran hablar de nosotros, o al menos vernos en ese lugar. fue preciso.
Entonces se rompió la conexión. Si el retiró la mano yo hice lo mismo -no era para tanto, de verdad pensabas que quería algún esclavo personal?- y sonreí un poco más, para eso tenía mis métodos. aún así, aseguré el libro y las copias con mis manos ahora libres -te lo devolveré cuanto antes, muchas gracias... y también gracias por salvarnos el pellejo, la vez pasada- su rostro parecía desconcertado. me encogí de hombros como respuesta -es lo que fue, sabías como así que indirectamente orquestaste todo, por eso, gracias- terminé mi bebida y me erguí haciendo que en el momento mi cabello se balanceara por sobre mi espalda -no te quitaré más el tiempo, pero te buscaré pronto-
Poder... aún se sentía correr en las venas... era excitante.
La cosa era esta. Todo mundo dice que el conocimiento es poder y pudieran estar en lo correcto, sin embargo era un poder limitado. toque su libro y recordé en el momento la peineta de mi madre -entonces deberías investigar que es lo que se dice de mi- "moralmente cuestionable... como no, esto era para salvarnos el pellejo, o tal vez no, pero era una simple cortesía, si el había pedido que nadie nos viese no tenía ningún inconveniente y el chico alto fornido y maldito ya nos había visto, dado que tenía la vista clavada sobre la nuca de Parrish.
El conocimiento no es poder. EL PODER ES EL PODER, y no hay más, el que tiene poder avasalla en un solo segundo. podrían hacer lo mismo los que solo se conformaban con conocimiento?
Me concentré en el chico, podría, sabía que podría o al menos eso intentaría. Solo que pasaba que no sabía como, las cosas que podía haber hecho antes sola no las planee y esta vez era diferente, además que no estaba Alex, para lograr las cosas más fuertes.
No supe definir el tiempo, el blando era sencillo pero el blanco si acaso de repente tenía sus ojos en mi. Me concentré más formándolo en mi mente, lo que quería, lo que necesitaba, solo que se olvidase de mi en ese momento y saliera del lugar, no era demasiado... que no recordara incluso haber ido al bar, y que si regresaba, fuera después de un momento. Pero Parrish sin embargo parecía no negármelo, no ahora... parrish.
Sin dejar de ver al chico, y sin pedir permiso tome la muñeca de Parrish. La conexión fue inmediata y supe que hacer. Una sonrisa se dibujó en mis labios antes de humedecerlo y sentí como la energía fue directa a su pecho, y como de l pecho le subió a la mente. Era mío... lo que yo quisiera lo tendría, pero también sentí la molestia de Parrish en eso, así que simplemente me limité a que se olvidara de nosotros en ese momento en especifico, fue como poner un parche, algo nebuloso en sus recuerdos que no le permitieran hablar de nosotros, o al menos vernos en ese lugar. fue preciso.
Entonces se rompió la conexión. Si el retiró la mano yo hice lo mismo -no era para tanto, de verdad pensabas que quería algún esclavo personal?- y sonreí un poco más, para eso tenía mis métodos. aún así, aseguré el libro y las copias con mis manos ahora libres -te lo devolveré cuanto antes, muchas gracias... y también gracias por salvarnos el pellejo, la vez pasada- su rostro parecía desconcertado. me encogí de hombros como respuesta -es lo que fue, sabías como así que indirectamente orquestaste todo, por eso, gracias- terminé mi bebida y me erguí haciendo que en el momento mi cabello se balanceara por sobre mi espalda -no te quitaré más el tiempo, pero te buscaré pronto-
Poder... aún se sentía correr en las venas... era excitante.
Laura Lerman- Mensajes : 226
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Miér Abr 04, 2012 1:54 am
No me gusta, no me gusta nada, aún menos cuando me toca y lo siento dentro de mi. Mucho menos porque puedo sentirla a ella, no sólo su poder traspasando a través de mi cuerpo para llegar a mi cerebro y hacer la conexión, también sus pensamientos, que una vez más no puedo apartar del todo de los mios, es un infierno. No me gusta meterme en la mente de nadie pero la de la rubia me gusta aún menos, porque veo en ella lo que puedo llegar a ser sin control, lo que ambos podemos llegar a ser. Y quiere usarlo, claro que sí, al final sólo cierra la compuerta de sus recuerdos para que no sepa que nos ha visto juntos, hasta eso lo considero deleznable, no es que quiera que vaya por el instituto diciendo que estaba con una animadora en un bar de mala muerte, tengo una reputacón...qué leches, tengo una polla y me gustaría conservarla, y conozco a Cabot. Pero sigue sin parecerme bien.
Al retirar la mano ella habla y asegura que no era para tanto...probablemente no.
- No soy quién pueda tirar la primera piedra, eso seguro...pero no vuelvas a hacerlo delante de mi...y menos atreverte a usarme para eso...
Me he puesto serio y me mira como si fuese una broma. Da las gracias, eso me sorprende.
- No me las des, no lo hice por ti, hice lo que tenía que hacer...intento hacerlo.
Intento explicarselo.
- Nunda te han dejado sin opciones, ¿verdad?...no sabes lo que se siente...¿y si tenía que reunirse aqui con alguien? ¿si tenía una cita? ¿lo has pensado siquiera?...imagina que ha quedado aqui con la mujer de su vida, por primera vez y él no aparece...y que si resulta que estaba destinado a emborracharse, quedarse hasta tarde y al salir al aparcamiento su presencia evitase ...que sé yo...que violasen a la camarera dos borrachos camioneros...¿quién eres tú para controlar el destino? ¿quién soy yo?...dijiste el sábado que un truco repetido no es novedad..la luz al menos no le hace daño a nadie...no creo que estes preparada para esto...y yo no quiero tener nada que ver con según que usos de la magia...si vas a ir por ese camino no me llames...si lees eso, lo entiendes y recapacitas..
Busco una servilleta y le apunto el número.
- Ahí tienes, salgo de trabajar todos los días a las nueve, pero duermo poco, asi que una si alguna vez comprendes que esto no es un juego estoy disponible...
Me levanto, dejando las monedas para pagar la cerveza.
Al retirar la mano ella habla y asegura que no era para tanto...probablemente no.
- No soy quién pueda tirar la primera piedra, eso seguro...pero no vuelvas a hacerlo delante de mi...y menos atreverte a usarme para eso...
Me he puesto serio y me mira como si fuese una broma. Da las gracias, eso me sorprende.
- No me las des, no lo hice por ti, hice lo que tenía que hacer...intento hacerlo.
Intento explicarselo.
- Nunda te han dejado sin opciones, ¿verdad?...no sabes lo que se siente...¿y si tenía que reunirse aqui con alguien? ¿si tenía una cita? ¿lo has pensado siquiera?...imagina que ha quedado aqui con la mujer de su vida, por primera vez y él no aparece...y que si resulta que estaba destinado a emborracharse, quedarse hasta tarde y al salir al aparcamiento su presencia evitase ...que sé yo...que violasen a la camarera dos borrachos camioneros...¿quién eres tú para controlar el destino? ¿quién soy yo?...dijiste el sábado que un truco repetido no es novedad..la luz al menos no le hace daño a nadie...no creo que estes preparada para esto...y yo no quiero tener nada que ver con según que usos de la magia...si vas a ir por ese camino no me llames...si lees eso, lo entiendes y recapacitas..
Busco una servilleta y le apunto el número.
- Ahí tienes, salgo de trabajar todos los días a las nueve, pero duermo poco, asi que una si alguna vez comprendes que esto no es un juego estoy disponible...
Me levanto, dejando las monedas para pagar la cerveza.
Jake Parrish- Admin
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Miér Abr 04, 2012 3:02 am
Lecciones de moral 2.0
Todo su discurso me quede callada, viéndolo sin una sola risa, sin ningún tipo de emoción, escuchándole si, aceptando sus palabras, jamás. El mundo era desdeñable, lo había aprendido ya hacía años, desde que mamá falleció y de repente un fulano con poderes que al parecer se creía mi padre me hablaba de opciones. quedarse sin opciones... claro.
Maldito el y todo lo que le rodease! porque ni un buen trato sabía apreciar, un imbécil con magia negra que sin embargo le daba por ser Clark Kent sin cristinita roja, lo cual lo dejaba en calidad de pelele. y que sabía el? nada, aún cuando pudiese sentirlo y seguramente el me sentía no se enteraba de mucho más. pues que todos los Dioses le abrieran la cabeza con un meteoro! hijo de.....
Estaba harta de su "trabajo" "no lo hago por ti" "si blablablabla.... no me llames" y teniendo su precioso libro en mis manos.....
Podría quemarlo, podría ver toda su sabiduría o lo que fuera para el ese libro consumirse de a poco, entregarle cenizas... idiota que piensa que mi vida es sencilla, que si yo al hacer un movimiento cambiara demasiado, bien, y que había de mi? cuales eran mis opciones?
Claro, las tenía en frente, en casa... mis opciones eran claras, o algún día me mataba Benjamin o algún día yo lo haría. aún era menor de edad y el flamante hombre que tenía por padre siempre quedaría bien, su hija es una puta y el solo quiere corregirla... mis opciones eran sencillas, ser la puta, o una puta asesina, mejor aún. Ir a la universidad? y con que dinero! porque además de imbécil Benjamin creía que la educación femenina es una perdida de tiempo "al final todas serán unas mantenidas listas para parir y todo lo invertido jamás redituara" claro... peor era la idea que tenía sobre su hija.
no le llamé a Alex, estaba furiosa, tanto que simplemente tiré los libros y las copias a donde fuese de mi cuarto y me ocupé de cerrar la ventana. era lo bueno del frio.. tenía una excusa al menos para decir el porque no le vería por las noches o porque cerraba mi ventana cerrándole el paso a el mismo.
Y los días pasaron, no demasiados y evidentemente, no le llamé. Afortunadamente tampoco vi su estúpida cara. me dediqué a lo básico, clases, entrenamiento, molestar a Benjamin y sobre todo, a los hermanos Kaiser, y no solamente a mi novio. Alex y yo no necesitábamos hablar para entonces para saber que es lo que queríamos, lo que los dos queríamos y queríamos a Alek, era importante,, no... era vital que después del susto nos redimiéramos, porque ya antes ambos le habíamos fallado.
Con Alex regresé apenas pude, o a penas pudo y entonces, parrish desapareció de mi mente, o al menos casi... en mis sueños estaba ahí, vigilándome pero al menos ya sin decir una sola palabra... ojalá también estuviese ciego.
Una de esas noches, sin embargo, no pude dormir. Alex se había ido a no se donde y ni siquiera pasaría la noche en casa, lo mismo que Alek y eso me dejaba, sola... tan sola que en la soledad comencé a buscar algo que hacer y encontré las copias desperdigadas que Parrish me había dado.
-mi familia- mascullé al momento de encender una lámpara. Tome los papeles, los ordené y comencé, sobre mi cama a leerlos. Comencé desde lo que sabía. Mamá, mi abuela, y de ahí a lo que conocía menos, cada vez menos. Existían muchos obituarios, pero las personas tenían la mala costumbre de morir con demasiada facilidad. Mamá al parecer había sido bastante controlada, los periódicos anunciaban solo cosas buenas de ella, aunque algunos, no la nombraban... fiestas, accidentes.... un muerto. lo de la abuela parecía un poco más complejo, pero a ella le habían tocado otras épocas, su esposo había fallecido... Lerman.... no teníamos mucho en esa ciudad, no éramos los colonizadores, lo sabía.
fruncí mi ceño al leer "laura lerman fallecida....." así que poro ella era quien había heredado el nombre.. no era novedad, había que usar la lógica ante todo. solo que a la siguiente hoja...
Petrificada, esa era la definición correcta. una niña rubia, una niña exactamente a como yo lucia a su edad.. que era esto, reencarnación? no.. no podría ser, las brujas al menos no reencarnan tan rápido, o no sabía. muerta por caída de caballo.... a partir de ahí, las cosas fueron más difusas. nacimientos, obituarios, hombres lerman, mujeres lerman... cambio de apellido, casadas pero esposos muertos incluso sin lograr otorgar el apellido a su heredero.. Lamentable.
Además de algunas ciudades no hubo mucho más que eso. Comencé a hojear el libro. no entendía mucho sin embargo los gráficos ahí eran claros. como formar un circulo, que se necesitaba... la oscuridad, el poder, el alma dividida... monstruos.
No, esa noche no pude dormir, por tanto no hubo sueños, pero al día siguiente, comencé a redactar como decían las primeras páginas del libro de Parrish un libro de la sombras, o mejor dicho, un libro de los espejos.
........................................
Benjamin casi se había zarceando, o yo se la había zarceando, casi y la sangre corría a raudales ensuciando la madera oscura. yo lo había deseado, quería matarle y el espejo.. el espejo! no hubo manera física para que esa cosa se partiera así, que le atacara así. Temblorosa llamé al 911, pero no fue necesario. Alex recién había entrado por la ventana, a buscarme, y encostró a un padre desangrándose y a una hija pálida. El nos llevó al hospital donde atendieron a Benjamin "el espejo se cayo" no era demasiado complicado, aunque fue ligeramente más complicado explicarle a ese chico que adoraba el porque yo también sangraba, solo un poco.
Apenas estuve en casa y busque a Parrish, o al menos su teléfono. no tenía ánimos siquiera de ser cínica
-lo tomo en serio- anuncie apenas el respondió a mi llamada -ahora se que puedo asesinar a alguien- esto ultimo hizo que se me quebrara la voz... desear con tanta fuerza que todo el universo conspirase para cumplir el deseo jamás había sido tan terrorífico -no..- respondí -no puedo estar en esta casa y no esperaré al colegio para verte- y colgué. Encontraría a Parrish así no supiese donde vivía. Sabía como hacerlo gracias al libro que el me había prestado
Todo su discurso me quede callada, viéndolo sin una sola risa, sin ningún tipo de emoción, escuchándole si, aceptando sus palabras, jamás. El mundo era desdeñable, lo había aprendido ya hacía años, desde que mamá falleció y de repente un fulano con poderes que al parecer se creía mi padre me hablaba de opciones. quedarse sin opciones... claro.
Maldito el y todo lo que le rodease! porque ni un buen trato sabía apreciar, un imbécil con magia negra que sin embargo le daba por ser Clark Kent sin cristinita roja, lo cual lo dejaba en calidad de pelele. y que sabía el? nada, aún cuando pudiese sentirlo y seguramente el me sentía no se enteraba de mucho más. pues que todos los Dioses le abrieran la cabeza con un meteoro! hijo de.....
Estaba harta de su "trabajo" "no lo hago por ti" "si blablablabla.... no me llames" y teniendo su precioso libro en mis manos.....
Podría quemarlo, podría ver toda su sabiduría o lo que fuera para el ese libro consumirse de a poco, entregarle cenizas... idiota que piensa que mi vida es sencilla, que si yo al hacer un movimiento cambiara demasiado, bien, y que había de mi? cuales eran mis opciones?
Claro, las tenía en frente, en casa... mis opciones eran claras, o algún día me mataba Benjamin o algún día yo lo haría. aún era menor de edad y el flamante hombre que tenía por padre siempre quedaría bien, su hija es una puta y el solo quiere corregirla... mis opciones eran sencillas, ser la puta, o una puta asesina, mejor aún. Ir a la universidad? y con que dinero! porque además de imbécil Benjamin creía que la educación femenina es una perdida de tiempo "al final todas serán unas mantenidas listas para parir y todo lo invertido jamás redituara" claro... peor era la idea que tenía sobre su hija.
no le llamé a Alex, estaba furiosa, tanto que simplemente tiré los libros y las copias a donde fuese de mi cuarto y me ocupé de cerrar la ventana. era lo bueno del frio.. tenía una excusa al menos para decir el porque no le vería por las noches o porque cerraba mi ventana cerrándole el paso a el mismo.
Y los días pasaron, no demasiados y evidentemente, no le llamé. Afortunadamente tampoco vi su estúpida cara. me dediqué a lo básico, clases, entrenamiento, molestar a Benjamin y sobre todo, a los hermanos Kaiser, y no solamente a mi novio. Alex y yo no necesitábamos hablar para entonces para saber que es lo que queríamos, lo que los dos queríamos y queríamos a Alek, era importante,, no... era vital que después del susto nos redimiéramos, porque ya antes ambos le habíamos fallado.
Con Alex regresé apenas pude, o a penas pudo y entonces, parrish desapareció de mi mente, o al menos casi... en mis sueños estaba ahí, vigilándome pero al menos ya sin decir una sola palabra... ojalá también estuviese ciego.
Una de esas noches, sin embargo, no pude dormir. Alex se había ido a no se donde y ni siquiera pasaría la noche en casa, lo mismo que Alek y eso me dejaba, sola... tan sola que en la soledad comencé a buscar algo que hacer y encontré las copias desperdigadas que Parrish me había dado.
-mi familia- mascullé al momento de encender una lámpara. Tome los papeles, los ordené y comencé, sobre mi cama a leerlos. Comencé desde lo que sabía. Mamá, mi abuela, y de ahí a lo que conocía menos, cada vez menos. Existían muchos obituarios, pero las personas tenían la mala costumbre de morir con demasiada facilidad. Mamá al parecer había sido bastante controlada, los periódicos anunciaban solo cosas buenas de ella, aunque algunos, no la nombraban... fiestas, accidentes.... un muerto. lo de la abuela parecía un poco más complejo, pero a ella le habían tocado otras épocas, su esposo había fallecido... Lerman.... no teníamos mucho en esa ciudad, no éramos los colonizadores, lo sabía.
fruncí mi ceño al leer "laura lerman fallecida....." así que poro ella era quien había heredado el nombre.. no era novedad, había que usar la lógica ante todo. solo que a la siguiente hoja...
Petrificada, esa era la definición correcta. una niña rubia, una niña exactamente a como yo lucia a su edad.. que era esto, reencarnación? no.. no podría ser, las brujas al menos no reencarnan tan rápido, o no sabía. muerta por caída de caballo.... a partir de ahí, las cosas fueron más difusas. nacimientos, obituarios, hombres lerman, mujeres lerman... cambio de apellido, casadas pero esposos muertos incluso sin lograr otorgar el apellido a su heredero.. Lamentable.
Además de algunas ciudades no hubo mucho más que eso. Comencé a hojear el libro. no entendía mucho sin embargo los gráficos ahí eran claros. como formar un circulo, que se necesitaba... la oscuridad, el poder, el alma dividida... monstruos.
No, esa noche no pude dormir, por tanto no hubo sueños, pero al día siguiente, comencé a redactar como decían las primeras páginas del libro de Parrish un libro de la sombras, o mejor dicho, un libro de los espejos.
........................................
Benjamin casi se había zarceando, o yo se la había zarceando, casi y la sangre corría a raudales ensuciando la madera oscura. yo lo había deseado, quería matarle y el espejo.. el espejo! no hubo manera física para que esa cosa se partiera así, que le atacara así. Temblorosa llamé al 911, pero no fue necesario. Alex recién había entrado por la ventana, a buscarme, y encostró a un padre desangrándose y a una hija pálida. El nos llevó al hospital donde atendieron a Benjamin "el espejo se cayo" no era demasiado complicado, aunque fue ligeramente más complicado explicarle a ese chico que adoraba el porque yo también sangraba, solo un poco.
Apenas estuve en casa y busque a Parrish, o al menos su teléfono. no tenía ánimos siquiera de ser cínica
-lo tomo en serio- anuncie apenas el respondió a mi llamada -ahora se que puedo asesinar a alguien- esto ultimo hizo que se me quebrara la voz... desear con tanta fuerza que todo el universo conspirase para cumplir el deseo jamás había sido tan terrorífico -no..- respondí -no puedo estar en esta casa y no esperaré al colegio para verte- y colgué. Encontraría a Parrish así no supiese donde vivía. Sabía como hacerlo gracias al libro que el me había prestado
Laura Lerman- Mensajes : 226
Fecha de inscripción : 28/10/2011
Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Lun Abr 09, 2012 2:06 am
No dije más, creo firmemente que es mejor no decir nada si no tienes nada que decir. Las conversaciones vacías me aburren, y las circunstanciales me dan dolor de cabeza. Me olvidé de la chica por esa noche, con otras cosas en las que pensar.
Dejé de seguirla, si, pero no por lo que ella dijera, yo no la he acosado jamás y los dos lo sabemos. No. El motivo es otro. Dejé de seguirla porque ya tenía los medios a su alcance para hacer lo correcto. Ahora era cosa suya. No puedes obligar a nadie a ser ayudado. Tiene que pedirlo él. Ella en este caso.
Y entonces llamó. A las tres de la mañana. Como estaba durmiendo no entendí muy bien lo que dijo. Algo de matar a alguien. Me puse los pantalones a oscuras esperando que se refiriese al profesor de ciencias, ese que me había tenido todo el día haciendo un estupido trabajo sobre la materia. Y bajé al vestibulo medio dormido, sólo para darme cuenta de que no habiamos quedado en ninguna parte en realidad.
Estaba por volver a la cama, pero me entró sed y fuí a por un vaso de zumo a la cocina y mientras me restregaba los ojos ví pasar un descapotable rojo a toda velocidad por la ventana. Uno que sin duda no pertenecía a la chica rubia. Levanté la persiana con un par de dedos y me fijé mejor. Estaba dando la vuelta.
Le abrí la puerta sin encender las luces del salón cuando consiguió aparcar en mi jardín...bueno, nunca tuvo cesped, algo menos que lamentar. Parecía alterada así que sólo me aparté para que se metiese dentro, eso sí, comprobé que nadie la veía entrar antes de cerrar tras ella.
- ¿A quién dices que has matado?- pregunté, al fin, desde la puerta, con muy poca preocupación- ehh...ehh...despacio...¿tu padre?...bueno, ¿y se lo merecía?...¿te ha dejado herencia?
Contuve un bostezo mientras intentaba pillar lo que la chica decía tan atropelladamente.
- Rubia...aún no me llega la sangre al cerebro...¿podemos empezar por el principio? ¿qué sabes?
Dejé de seguirla, si, pero no por lo que ella dijera, yo no la he acosado jamás y los dos lo sabemos. No. El motivo es otro. Dejé de seguirla porque ya tenía los medios a su alcance para hacer lo correcto. Ahora era cosa suya. No puedes obligar a nadie a ser ayudado. Tiene que pedirlo él. Ella en este caso.
Y entonces llamó. A las tres de la mañana. Como estaba durmiendo no entendí muy bien lo que dijo. Algo de matar a alguien. Me puse los pantalones a oscuras esperando que se refiriese al profesor de ciencias, ese que me había tenido todo el día haciendo un estupido trabajo sobre la materia. Y bajé al vestibulo medio dormido, sólo para darme cuenta de que no habiamos quedado en ninguna parte en realidad.
Estaba por volver a la cama, pero me entró sed y fuí a por un vaso de zumo a la cocina y mientras me restregaba los ojos ví pasar un descapotable rojo a toda velocidad por la ventana. Uno que sin duda no pertenecía a la chica rubia. Levanté la persiana con un par de dedos y me fijé mejor. Estaba dando la vuelta.
Le abrí la puerta sin encender las luces del salón cuando consiguió aparcar en mi jardín...bueno, nunca tuvo cesped, algo menos que lamentar. Parecía alterada así que sólo me aparté para que se metiese dentro, eso sí, comprobé que nadie la veía entrar antes de cerrar tras ella.
- ¿A quién dices que has matado?- pregunté, al fin, desde la puerta, con muy poca preocupación- ehh...ehh...despacio...¿tu padre?...bueno, ¿y se lo merecía?...¿te ha dejado herencia?
Contuve un bostezo mientras intentaba pillar lo que la chica decía tan atropelladamente.
- Rubia...aún no me llega la sangre al cerebro...¿podemos empezar por el principio? ¿qué sabes?
Jake Parrish- Admin
- Mensajes : 206
Fecha de inscripción : 28/10/2011
Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Mar Abr 10, 2012 4:21 am
No tenía nada en la cabeza, pero a la vez todo me rondaba y daba vueltas. tenía mi objetivo inmediato. Encontrar a Parrish. No, este no era mi auto y claro que tendría problemas para explicarlo, pero esos problemas podrían esperar, todo podría esperar menos esto. no teía ni idea de lo que hacía, pero ahora tenía una idea clara de lo que podía hacer si no medía consecuencias.
Y seguía sin medirlas. Robo de auto.... toda la velocidad y potencia posible y la mente fija en Parrish, era como un llamado, una conexión rara que jamás había sentido. no me di cuenta de como aparque y me importo nada cuando supe que el subir a esa banqueta había lastimado la pintura roja, antes reluciente.. ahora un problema. otro problema que no me importaba.
Tenía su libro en mano y ni siquiera tuve que tocar, no pedí permiso y simplemente entre. estaba lleno de oscuridad y no me importaba, no es que tuviese las manos heladas, no es que tuviese miedo reflejado en el rostro, es que simplemente abrí la boca y la voz no me salía.
Lo intenté dos, tres veces y cuando finalmente lo logré, lo primero que salió fue una risa, la risa nerviosa que se da cuando no se puede llorar. -no, creo que de herencia solo tengo maldiciones-
A continuación se lo dije, de manera rápida, la parte furiosa, el espejo, mis deseos, el resultado... si acaso salvé la razón del porque estaba furiosa, los insultos habituales y los golpes. Era más sano, y mucho más si lo decía mientras deambulaba por el salón de un lado a otro sin verle a los ojos, no tenía ganas de ver a nadie a los ojos, no los fuese también a maldecir.
-que se?- respondí parando por primera vez. cierto, el no había estado presente y no lo entendía. tendría que resumirlo todo en pocas frases. eso era, relativamente sencillo
-que puedo asesinar si tengo deseo de hacerlo, hoy yo provoque algo, no medí consecuencias y pudo ser peor, podría haber muerto.. ese hombre.... se supone que es mi padre... Parrish, puedo asesinar a mi padre- y se me cortó la voz. tampoco quería sostenerle la mirada mucho más. simplemente me dejé caer en el sillón que estaba justo detrás de mi, cubriéndome la cara con las manos, sintiendo la hinchazón en mi rostro, parte de las heridas de la guerra ejecutada esa noche. ya casi no dolían, hacía tiempo me había inmunizado a ese tipo de dolor
-necesito apagarlo, se lo merece, pero jamás de mi mano... nadie me dijo que esto podría pasar, nada me preparó para esto y mi madre debería haberme dado una breve explicación....- pero claro, la vida no era justa, no conmigo al menos. entonces me día cuenta. Parrish en serio era mi única fuente de información, el único que sabía más de lo que pasaba, el que era más similar a mi... cosa curiosa ese hombre no era de mi agrado y estaba más que declarado, yo no le agradaba. como demonios podríamos funcionar?
-espero que tu tuvieses más entrenamiento que yo, o que no hayas asesinado a nadie al menos- añadí intentando ser lo más fuerte posible, aun cuando sentía los ojos arder, no era tiempo de llorar... tampoco pude pensar... no era tiempo de nada.
Y seguía sin medirlas. Robo de auto.... toda la velocidad y potencia posible y la mente fija en Parrish, era como un llamado, una conexión rara que jamás había sentido. no me di cuenta de como aparque y me importo nada cuando supe que el subir a esa banqueta había lastimado la pintura roja, antes reluciente.. ahora un problema. otro problema que no me importaba.
Tenía su libro en mano y ni siquiera tuve que tocar, no pedí permiso y simplemente entre. estaba lleno de oscuridad y no me importaba, no es que tuviese las manos heladas, no es que tuviese miedo reflejado en el rostro, es que simplemente abrí la boca y la voz no me salía.
Lo intenté dos, tres veces y cuando finalmente lo logré, lo primero que salió fue una risa, la risa nerviosa que se da cuando no se puede llorar. -no, creo que de herencia solo tengo maldiciones-
A continuación se lo dije, de manera rápida, la parte furiosa, el espejo, mis deseos, el resultado... si acaso salvé la razón del porque estaba furiosa, los insultos habituales y los golpes. Era más sano, y mucho más si lo decía mientras deambulaba por el salón de un lado a otro sin verle a los ojos, no tenía ganas de ver a nadie a los ojos, no los fuese también a maldecir.
-que se?- respondí parando por primera vez. cierto, el no había estado presente y no lo entendía. tendría que resumirlo todo en pocas frases. eso era, relativamente sencillo
-que puedo asesinar si tengo deseo de hacerlo, hoy yo provoque algo, no medí consecuencias y pudo ser peor, podría haber muerto.. ese hombre.... se supone que es mi padre... Parrish, puedo asesinar a mi padre- y se me cortó la voz. tampoco quería sostenerle la mirada mucho más. simplemente me dejé caer en el sillón que estaba justo detrás de mi, cubriéndome la cara con las manos, sintiendo la hinchazón en mi rostro, parte de las heridas de la guerra ejecutada esa noche. ya casi no dolían, hacía tiempo me había inmunizado a ese tipo de dolor
-necesito apagarlo, se lo merece, pero jamás de mi mano... nadie me dijo que esto podría pasar, nada me preparó para esto y mi madre debería haberme dado una breve explicación....- pero claro, la vida no era justa, no conmigo al menos. entonces me día cuenta. Parrish en serio era mi única fuente de información, el único que sabía más de lo que pasaba, el que era más similar a mi... cosa curiosa ese hombre no era de mi agrado y estaba más que declarado, yo no le agradaba. como demonios podríamos funcionar?
-espero que tu tuvieses más entrenamiento que yo, o que no hayas asesinado a nadie al menos- añadí intentando ser lo más fuerte posible, aun cuando sentía los ojos arder, no era tiempo de llorar... tampoco pude pensar... no era tiempo de nada.
Laura Lerman- Mensajes : 226
Fecha de inscripción : 28/10/2011
Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Mar Abr 10, 2012 1:13 pm
Estaba balbuceando, ¿saben aquel que diu...? una rubia entra en un bar y se pone a balbucear...si, toda la pinta de ser el comienzo de un chiste malo, pero el caso es que la rubia estaba balbuceando y no me siento cómodo cuando las chicas balbucean, o lloran, para el caso. No me gusta.
Me cuenta algo sobre un espejo que estalla, su padre, una ambulancia...no acabo de entenderlo todo pero relleno los huecos y me quedo con lo importante.
- ¿Está muerto?
Tampoco me cambia el tono al preguntarlo, si he aprendido algo en la desestructurada vida que llevo es que hay que ser practico, una vez hecho lo mejor es no preocuparse por si está bien o mal, mejor preocupate de que no te pillen.
No lo está, deduzco por lo que dice a continuación.
- Bueno, algunos estarían más que felices del poder cargarse al viejo...conozco unos cuantos...
El apunte no deja de ser cierto. Jesus, tengo sueño. Se ha sentado por fin, me estaba mareando con tanta ida y vuelta, me desgastará la alfombra...¿debería decirle que ahí es donde ha potado mi abuelo la última vez?...no, mejor no.
Si, claro. Su madre, debió decirselo, como la mía y la de todos, curiosamente nuinguna lo hizo, quizá se murieron antes de poder, yo que sé, no juzgo a los muertos, sus razones tendrian.
- A ver chica...
Intento calmarla, pero no sé cómo, nunca he tenido que hacerlo, no tengo amigas ni hermanas, ni primas, para el caso. Frunzo el ceño, me encojo de hombros resignandome a intentarlo y voy, antes de nada, a por un par de botellas de cerveza en la nevera, destapo ambas mirandolas con nostalgía, mis dos últimas estrellas, pero me acerco al sofá, se la tiendo y me siento a su lado. Dudo un momento, no sé qué es lo apropiado, cogerle la mano, tocarle el pelo...suspiro y hago un intento de pasarle el brazo por los hombros, me resulta incomodo y lo aparto, vuelvo a intentarlo. Ahora me mira entrecerrando los ojos, cómo viendo qué hago.
- yo qué sé...no hago esto a menudo, ¿sabes?
Protesto alzando la voz, y la rubia de prnto se parte. Se está riendo de mi...niego elevando los ojos al cielo a la par que vuelvo a pasarle el brazo.
- No me putees Lerman...te conviene tenerme cerca si hay un accidente...
Se calla y me mira, a punto de decir algo sin duda. Termino el pensamiento antes de que lo haga.
- conozco un buen truco para hacer desaparecer el cuerpo...ya sabes, sin cuerpo no hay delito...
Y me rio, finalmente, al ver su cara de poker momentanea.
- No he matado a nadie, que yo sepa, yo como Dobby, mi intención nunca es matar...
Sigo bromeando. Le doy un par de golpecitos en el hombro, sigo incomodo, al final retiro el brazo. Esto no es lo mío. Tomo un par de sorbos de la cerveza y la miro, concentrandome en ella.
- No es tan grave, no está muerto...además voy a ayudarte. No estás sola Lerman, somos seis. ¿tu padre se dió cuenta de lo que pasaba?- asiente- le borraremos la memoria- afirmo entonces, sin asomo de duda.
Me cuenta algo sobre un espejo que estalla, su padre, una ambulancia...no acabo de entenderlo todo pero relleno los huecos y me quedo con lo importante.
- ¿Está muerto?
Tampoco me cambia el tono al preguntarlo, si he aprendido algo en la desestructurada vida que llevo es que hay que ser practico, una vez hecho lo mejor es no preocuparse por si está bien o mal, mejor preocupate de que no te pillen.
No lo está, deduzco por lo que dice a continuación.
- Bueno, algunos estarían más que felices del poder cargarse al viejo...conozco unos cuantos...
El apunte no deja de ser cierto. Jesus, tengo sueño. Se ha sentado por fin, me estaba mareando con tanta ida y vuelta, me desgastará la alfombra...¿debería decirle que ahí es donde ha potado mi abuelo la última vez?...no, mejor no.
Si, claro. Su madre, debió decirselo, como la mía y la de todos, curiosamente nuinguna lo hizo, quizá se murieron antes de poder, yo que sé, no juzgo a los muertos, sus razones tendrian.
- A ver chica...
Intento calmarla, pero no sé cómo, nunca he tenido que hacerlo, no tengo amigas ni hermanas, ni primas, para el caso. Frunzo el ceño, me encojo de hombros resignandome a intentarlo y voy, antes de nada, a por un par de botellas de cerveza en la nevera, destapo ambas mirandolas con nostalgía, mis dos últimas estrellas, pero me acerco al sofá, se la tiendo y me siento a su lado. Dudo un momento, no sé qué es lo apropiado, cogerle la mano, tocarle el pelo...suspiro y hago un intento de pasarle el brazo por los hombros, me resulta incomodo y lo aparto, vuelvo a intentarlo. Ahora me mira entrecerrando los ojos, cómo viendo qué hago.
- yo qué sé...no hago esto a menudo, ¿sabes?
Protesto alzando la voz, y la rubia de prnto se parte. Se está riendo de mi...niego elevando los ojos al cielo a la par que vuelvo a pasarle el brazo.
- No me putees Lerman...te conviene tenerme cerca si hay un accidente...
Se calla y me mira, a punto de decir algo sin duda. Termino el pensamiento antes de que lo haga.
- conozco un buen truco para hacer desaparecer el cuerpo...ya sabes, sin cuerpo no hay delito...
Y me rio, finalmente, al ver su cara de poker momentanea.
- No he matado a nadie, que yo sepa, yo como Dobby, mi intención nunca es matar...
Sigo bromeando. Le doy un par de golpecitos en el hombro, sigo incomodo, al final retiro el brazo. Esto no es lo mío. Tomo un par de sorbos de la cerveza y la miro, concentrandome en ella.
- No es tan grave, no está muerto...además voy a ayudarte. No estás sola Lerman, somos seis. ¿tu padre se dió cuenta de lo que pasaba?- asiente- le borraremos la memoria- afirmo entonces, sin asomo de duda.
Jake Parrish- Admin
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Miér Abr 11, 2012 2:01 am
La botella de cerveza lo entendía y por dentro se lo agradecí, aún cuando no sabía de donde venía ese aromita a queso rancio que rondaba por la sala, o el sillón. a lo mejor ahí también estaba su alacena. Que se sentara junto a mi también era normal, porque ninguno de los dos teníamos que vivir en una burbuja, el no era John travolta y yo no era.... como se llamase la chica que salió en esa película, era vieja, demasiado vieja como para saberse la ficha técnica pero lo demás.
fue raro... como si estuviese viendo a un hipopótamo pasar desapercibido escondiéndose tras una varita de bambú, con tutú rosa integrado. eso mismo fue el consuelo que recibí de parte de parris. Dos frotes arriba y dos abajo intercalados. su espalda firme y separada de mi lo más que se podía.
Pude jurar, de verdad que escuché mugir una vaca cuando lo intento, así de natural y elegante fue.
Le ví a los ojos pensando en el momento en que su cerebro fue extirpado para darle cabida a algún alíen. Dicen que esos se ven en los ojos, que dan reflejos plata, al menos ne la versión mormona que tiene stephenie meyer sobre los extraterrestres. el se disculpa y yo lo asumo
Y me rio, me rio porque de verdad no puedo hacer otra cosa, por nervios, por lo ridículo del momento, porque por primera vez el se está esforzando en ser amable, y se le da fatal! aunque claro el también me toma el pelo.
que si lo creo capaz de asesinar para ya saber que hacer con los cuerpos. Si, porque todo mundo es capaz de hacer toda cosa siempre que se tenga el aliciente suficiente. Lo veo y si primero no le demuestro nada, la verdad es que no estoy como para hacerme la chica dura. Me espanto y pienso ya en maniobras de acción para deshacerme de Jake el destripador de brujas.
Pero entonces se rie y cita a Dobby... eso me hizo arquear las cejas y sonreír esta vez porque me nace
-vaya Potter, si lo tuyo es herir de gravedad o sarsenar, pero no matar- apostillo entonces, el se sabe el dialogo, hay que responderle en la misma lengua. Una chica me lo había dicho alguna vez y no le creí. ahora si que lo hago "el lenguaje freeky es universal"
ya. finalmente el contacto raro entre dos navez nodrizas se termina y acompaño en su trago a cara de Potter... que podría ser el de hufflepuff, pero me da que no, este hombre tiene cara de James Potter en sus tiempos insoportables.
Afortunadamente, el tenía mucho más cordura que yo. Asentía su pregunta. no le preocupó que fuese bruja, solo su brazo y lesiones menores. pero si hablaba. bueno... seguramente me ganaría todos los boletos para el nuevo reallity de la letra escarlata feat quema de salem
Le creo por completo. y asiento de nueva cuenta. -sigue en el hospital- menciono mientras razono. somos seis... seis, porque me siento como si de repente solo estuviese el para entenderme... estúpida identificación de la magia. daban huellas de caminos fácilmente seguibles.
-algo me huele mal- acoto con seriedad, el parecía estar interesado y somnoliento, pero buscando el porque de las cosas -no, es en serio, este sillón huele fatal- y reviso el sillón, no encuentro más que algo duro que mejor no le dedicaré tiempo ni cabeza.
-yo... - comencé viéndolo un poco analizando mis palabras, no era del tipo de personas que le gustase que le dijeran las cosas, creo yo, pero si el que le gustase que se las demostraran –debí escucharte antes- finalicé resumiendo entonces que todo error había sido mio -eso es, puedes burlarte, a lo mejor las rubias somos estúpidas, no me quejaré, lo eh demostrado esta noche, pero solo esta noche- y deje entonces la cerveza sobre una mesa con una lámpara -por cierto... me encanta tu jardín.. ahora nos vamos al hospital?-
fue raro... como si estuviese viendo a un hipopótamo pasar desapercibido escondiéndose tras una varita de bambú, con tutú rosa integrado. eso mismo fue el consuelo que recibí de parte de parris. Dos frotes arriba y dos abajo intercalados. su espalda firme y separada de mi lo más que se podía.
Pude jurar, de verdad que escuché mugir una vaca cuando lo intento, así de natural y elegante fue.
Le ví a los ojos pensando en el momento en que su cerebro fue extirpado para darle cabida a algún alíen. Dicen que esos se ven en los ojos, que dan reflejos plata, al menos ne la versión mormona que tiene stephenie meyer sobre los extraterrestres. el se disculpa y yo lo asumo
Y me rio, me rio porque de verdad no puedo hacer otra cosa, por nervios, por lo ridículo del momento, porque por primera vez el se está esforzando en ser amable, y se le da fatal! aunque claro el también me toma el pelo.
que si lo creo capaz de asesinar para ya saber que hacer con los cuerpos. Si, porque todo mundo es capaz de hacer toda cosa siempre que se tenga el aliciente suficiente. Lo veo y si primero no le demuestro nada, la verdad es que no estoy como para hacerme la chica dura. Me espanto y pienso ya en maniobras de acción para deshacerme de Jake el destripador de brujas.
Pero entonces se rie y cita a Dobby... eso me hizo arquear las cejas y sonreír esta vez porque me nace
-vaya Potter, si lo tuyo es herir de gravedad o sarsenar, pero no matar- apostillo entonces, el se sabe el dialogo, hay que responderle en la misma lengua. Una chica me lo había dicho alguna vez y no le creí. ahora si que lo hago "el lenguaje freeky es universal"
ya. finalmente el contacto raro entre dos navez nodrizas se termina y acompaño en su trago a cara de Potter... que podría ser el de hufflepuff, pero me da que no, este hombre tiene cara de James Potter en sus tiempos insoportables.
Afortunadamente, el tenía mucho más cordura que yo. Asentía su pregunta. no le preocupó que fuese bruja, solo su brazo y lesiones menores. pero si hablaba. bueno... seguramente me ganaría todos los boletos para el nuevo reallity de la letra escarlata feat quema de salem
Le creo por completo. y asiento de nueva cuenta. -sigue en el hospital- menciono mientras razono. somos seis... seis, porque me siento como si de repente solo estuviese el para entenderme... estúpida identificación de la magia. daban huellas de caminos fácilmente seguibles.
-algo me huele mal- acoto con seriedad, el parecía estar interesado y somnoliento, pero buscando el porque de las cosas -no, es en serio, este sillón huele fatal- y reviso el sillón, no encuentro más que algo duro que mejor no le dedicaré tiempo ni cabeza.
-yo... - comencé viéndolo un poco analizando mis palabras, no era del tipo de personas que le gustase que le dijeran las cosas, creo yo, pero si el que le gustase que se las demostraran –debí escucharte antes- finalicé resumiendo entonces que todo error había sido mio -eso es, puedes burlarte, a lo mejor las rubias somos estúpidas, no me quejaré, lo eh demostrado esta noche, pero solo esta noche- y deje entonces la cerveza sobre una mesa con una lámpara -por cierto... me encanta tu jardín.. ahora nos vamos al hospital?-
Laura Lerman- Mensajes : 226
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Miér Abr 11, 2012 2:35 am
Se relaja, y al hacerlo me quita un peso de encima. Definitivamente las relaciones humanas no son lo mío, al menos no en cuanto salgo de mi circulo de confianza, a saber mi abuelo, dos amigos de la infancia a los que apenas veo, la gente del pueblo y el carnicero. Realmente tengo problemas para relacionarme, ahora que lo pienso. Lo malo es que no me importa, asi que nunca he obtenido motivos para precuparme o molestarme en intentarlo.
Ahora lo intento pero no me sale. Al menos se rie, y parece menos alterada cuando afirmo que nunca he matado a nadie. Supongo que se ha creido las historias que cuentan por ahí, la gente tiene mucha imaginación y exceso de tiempo libre.
- Es posible- contesto con gracia cuando se refiere al olor, y acabo por confesar- mi abuelo vomitó ahí ayer y aún no he podido limpiarlo a conciencia pero estabas tan alterada que no me pareció correcto indicartelo en ese momento, pensé que mejor te dejaba desahogar primero...
Y luego es pone a pedir disculpas o algo asi y vuelvo a incomodarme.
- No es tu culpa rubia- admito, finalmente, sin animo de discutir- tenía que pasas antes o después...nadie te dió a escoger asi que no debes sentirte culpable...además- me encojo de hombros viendo como se levanta de golpe y ser aparta del sofá- si el tipo se lo merece no seré yo quién juzgue...
Dice de ir al hospital y la miro de hito en hito mientras me termino la cerveza.
- Creí que se lo mercía...¿vamos a hacerle una visita de cortesía?...por mi se puede pudrir...
Y entonces lo entiendo.
- Para nada...no necesitamos ni acercarnos para eso...dejame ir a por una camiseta arriba, tengo todo lo necesario en el garage...de paso puedes contarme qué has leido de tu familia y del libro y si tienes alguna duda...ya vuelvo.
Y me apresuré a subir las escaleras corriendo y a oscuras para coger una camiseta en el cuarto, ponermela por encima también sin mirar y volver a bajar.
- ¿te importa si antes me hago un café?...¿quieres uno?
Ahora lo intento pero no me sale. Al menos se rie, y parece menos alterada cuando afirmo que nunca he matado a nadie. Supongo que se ha creido las historias que cuentan por ahí, la gente tiene mucha imaginación y exceso de tiempo libre.
- Es posible- contesto con gracia cuando se refiere al olor, y acabo por confesar- mi abuelo vomitó ahí ayer y aún no he podido limpiarlo a conciencia pero estabas tan alterada que no me pareció correcto indicartelo en ese momento, pensé que mejor te dejaba desahogar primero...
Y luego es pone a pedir disculpas o algo asi y vuelvo a incomodarme.
- No es tu culpa rubia- admito, finalmente, sin animo de discutir- tenía que pasas antes o después...nadie te dió a escoger asi que no debes sentirte culpable...además- me encojo de hombros viendo como se levanta de golpe y ser aparta del sofá- si el tipo se lo merece no seré yo quién juzgue...
Dice de ir al hospital y la miro de hito en hito mientras me termino la cerveza.
- Creí que se lo mercía...¿vamos a hacerle una visita de cortesía?...por mi se puede pudrir...
Y entonces lo entiendo.
- Para nada...no necesitamos ni acercarnos para eso...dejame ir a por una camiseta arriba, tengo todo lo necesario en el garage...de paso puedes contarme qué has leido de tu familia y del libro y si tienes alguna duda...ya vuelvo.
Y me apresuré a subir las escaleras corriendo y a oscuras para coger una camiseta en el cuarto, ponermela por encima también sin mirar y volver a bajar.
- ¿te importa si antes me hago un café?...¿quieres uno?
Jake Parrish- Admin
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Miér Abr 11, 2012 11:37 am
Normalmente le diría que si que se puede pudrir, porque? porque pese a el susto, aún siento nuevos golpes, tal vez se le olvido que los maltratos ni de como mi vida, justamente termino podrida en casi todos los aspectos, que apenas y se salva de milagro porque solo por Alex me he mantenido en u mejor rumbo. suena tan cursi y asqueroso que de solo pensarlo me doy de topes contra la pared, al menos en mi interior. esta chica bien portada no era lo que quería ser, si a caso ser exactamente lo que Benjamin no deseaba. Bien, apuesto que jamás deseo tener en su hija a una asesina, así que al menos ese aspecto estaba cubierto. Solo que... yo no quería serlo
No respondí a eso, pero si le vi a los ojos para aclarar lo evidente -borrarle la memoria esas cosas le atacaron, no simplemente cayeron y el pedazo más grande le impidió... el paso- y no terminé no quería decirle que el espejo voló en mil pedazos pero que el mayor de ellos había cortado tan profundamente su piel solo para evitar que me tocase una vez más.
Sube, corre, baja y regresa con la camisa al revés -buen estilo- comenté sin saber quehacer. en su trayecto encendí algunas luces más, pero no me dio tiempo para andar merodeando por ahí, ni tampoco lo quería.
no le toqué sin embargo. entendía bien lo que era el respetar el espacio vital, otra cosa era que realmente quisiese respetarlo, pero el lo había dicho, me conviene más tenerlo así, además en realidad ya se lo debía.
-café- e hice un mohín, no era lo que yo esperaba pero estaba bien, estaba perfecto de hecho de todas maneras, iba a ser imposible pegar el ojo esa noche el se va a la cocina, yo le seguí y me di cuenta de que en realidad tenían poco.. lo indispensable y poco más sin contar que no había tenido tiempo para fregar los trastos. el se fue directo al grifo para tomar el agua que después sería calentada, yo me fui directa al menos a lavar un par de tasas, cucharas y lo necesario, para el y para mi. se que me vio hacerlo y le extraño pero no dijo nada así que cada cual, se fue a lo suyo -me gusta negro- afirmé cuando ya estaba secando la segunda tasa y la ponía sobre la barra más cercana, me sentaba en un banquillo y esperaba a que el hiciera lo mismo
-gracias- nuevamente y esta vez de corazón. aspiré profusamente... adoraba el olor del café, me hacía sentir viva y feliz, en cierta medida, el café no me recordaba a m madre, si no a mi abuela, antes de que un buen día, se fuera.
bebí un sorbo apenas pude, incluso si esto me quemaba la lengua. solo después de eso me digné a hablar -el material que me has dado si, lo eh revisado todo, incluso la pintura de la niña.. Laura- y sonreí de manera ladeada al recordarlo -al parecer soy idéntica a ella, o al menos lo fui y tal vez lo seria si ella hubiese sobrevivido- así mismo comenté lo básico, lo que el definitivamente ya sabía dado que el mismo me había dado la información
Estaba nerviosa, si, ansiosa sin dudas, la prioridad en ese momento era que a) no recordase anda Benjamin y b) tal vez que no perdiese el brazo -borrar la memoria es poco ético- recordé sus palabras pero no lo hice en tono de joda, es que simplemente entendía que lo hacía el porque era necesario. Sería por mi como mero gesto de humanidad, por el circulo o por el mismo, daba igual... me ayudaba sin nada a cambio y eso era de sorprender -puedes hacerlo sin verle?- y claro el podía hacerlo. fruncí el ceño -pero ni siquiera le conoces y créeme no basta con verme, no tengo nada de el... incluso albergo la idea de que ese hombre no es mi padre- espero que mi tono no le de a entender de más, que no sea lo suficientemente observador, pero es que simplemente, empero... no me restan demasiadas fuerzas para mantener el tipo y mentir.
Pero Parrish no lo necesito. necesito mi sangre, necesito mi mano y necesito la luz de la vela que justo había sido manchada con la sangre que había obtenido de mi.
No respondí a eso, pero si le vi a los ojos para aclarar lo evidente -borrarle la memoria esas cosas le atacaron, no simplemente cayeron y el pedazo más grande le impidió... el paso- y no terminé no quería decirle que el espejo voló en mil pedazos pero que el mayor de ellos había cortado tan profundamente su piel solo para evitar que me tocase una vez más.
Sube, corre, baja y regresa con la camisa al revés -buen estilo- comenté sin saber quehacer. en su trayecto encendí algunas luces más, pero no me dio tiempo para andar merodeando por ahí, ni tampoco lo quería.
no le toqué sin embargo. entendía bien lo que era el respetar el espacio vital, otra cosa era que realmente quisiese respetarlo, pero el lo había dicho, me conviene más tenerlo así, además en realidad ya se lo debía.
-café- e hice un mohín, no era lo que yo esperaba pero estaba bien, estaba perfecto de hecho de todas maneras, iba a ser imposible pegar el ojo esa noche el se va a la cocina, yo le seguí y me di cuenta de que en realidad tenían poco.. lo indispensable y poco más sin contar que no había tenido tiempo para fregar los trastos. el se fue directo al grifo para tomar el agua que después sería calentada, yo me fui directa al menos a lavar un par de tasas, cucharas y lo necesario, para el y para mi. se que me vio hacerlo y le extraño pero no dijo nada así que cada cual, se fue a lo suyo -me gusta negro- afirmé cuando ya estaba secando la segunda tasa y la ponía sobre la barra más cercana, me sentaba en un banquillo y esperaba a que el hiciera lo mismo
-gracias- nuevamente y esta vez de corazón. aspiré profusamente... adoraba el olor del café, me hacía sentir viva y feliz, en cierta medida, el café no me recordaba a m madre, si no a mi abuela, antes de que un buen día, se fuera.
bebí un sorbo apenas pude, incluso si esto me quemaba la lengua. solo después de eso me digné a hablar -el material que me has dado si, lo eh revisado todo, incluso la pintura de la niña.. Laura- y sonreí de manera ladeada al recordarlo -al parecer soy idéntica a ella, o al menos lo fui y tal vez lo seria si ella hubiese sobrevivido- así mismo comenté lo básico, lo que el definitivamente ya sabía dado que el mismo me había dado la información
Estaba nerviosa, si, ansiosa sin dudas, la prioridad en ese momento era que a) no recordase anda Benjamin y b) tal vez que no perdiese el brazo -borrar la memoria es poco ético- recordé sus palabras pero no lo hice en tono de joda, es que simplemente entendía que lo hacía el porque era necesario. Sería por mi como mero gesto de humanidad, por el circulo o por el mismo, daba igual... me ayudaba sin nada a cambio y eso era de sorprender -puedes hacerlo sin verle?- y claro el podía hacerlo. fruncí el ceño -pero ni siquiera le conoces y créeme no basta con verme, no tengo nada de el... incluso albergo la idea de que ese hombre no es mi padre- espero que mi tono no le de a entender de más, que no sea lo suficientemente observador, pero es que simplemente, empero... no me restan demasiadas fuerzas para mantener el tipo y mentir.
Pero Parrish no lo necesito. necesito mi sangre, necesito mi mano y necesito la luz de la vela que justo había sido manchada con la sangre que había obtenido de mi.
Laura Lerman- Mensajes : 226
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Jue Abr 12, 2012 10:39 pm
- No tienes que contarmelo si no quieres- aduje, sin mirarla al hacerlo, no porque me resultase más cómodo, simplemente porque buscaba otra cosa, cucharillas limpias- esto no funciona así- continué buscando con la vista a medida que me acercaba a la encimera- cuidamos unos de otros, si uno cae los otros se debilitan...aún no sabeis la parte chunga...
Nada, no encuentro ni una. La miro ahora, porque hace un comentario que no entiendo a la primera, luego miro hacía abajo para ver mi camiseta, ¿qué le pasa? Ah, vale, que me la puse del revés...me encojo de hombros.
- Es más bonita asi, creeme...por delante hay un zombie sacandole las tripas a un vaquero.
Se pone a encender las luces y yo voy detrás apagandolas, aunque dejo encendida la de la cocina. Me mira como inquiriendo el por qué, soy escueto.
- Luego soy yo el que paga la factura
No es sólo por eso, claro, pero no tengo por qué explicarle que si se levanta al baño y ve la luz el abuelo ya no vuelve a dormirse, porque bajará, se tomará un trago, y después de ese venbrán quince más, acabaré pasando la mañana limpiando sus vomitos antes de ir a clase y sin pegar ojo. No gracias.
Se pone a fregar sin que nadie se lo pida, no sabía que las rubias pijas supiesen usar jabón y freganzo...nunca te acostarás...seguro que Cabot no sabe...aparto la vista y no digo nada, le daría las gracias si se lo hubiese pedido pero no ha sido así, además no necesito que nadie me ayude con las tareas, llevo años apañandome solito...me enfuruño un poco, pero vuelvo a pensar en Cabot fregando platos y acabo emulando una sonrisa torcida.
Le tiendo el suyo una vez listo.
- Con cuidado...está muy caliente- advierto, porque no tengo leche para templarlo, acabo de mirar y no queda ni un cartón en la nevera, recuerdo que he de ir a la compra, debí ir anteayer, pero mi vida se complicó.
- ¿No hay nada que te haya llamado particularmente la atención?- pregunto en tono caustico sentandome en un taburete enfrente de ella, y alzo una ceja, esperando respuesta mientras soplo un poco para enfriar mi café.
Me devuelve mis palabras, sonrio y niego con la cabeza.
- No, no lo es...pero no es lo mismo borrarle la memoria a un tipo cualquiera solo porque no nos conviene a borrarsela a un capullo por necesidad y supervivencia...no pretendo dar clases de moral, aunque a veces parezcas creer que sí...ví tu cara el otro dia- respondo sin que pregunte- se te notaban a leguas las ganas de mandarme a la mierda...sólo me preocupa que alguno de nosotros acabe con complejo de Dios y nos mande a todos al foso...
Asiento, cuando se centra en lo que nos atañe inmediatamente y confirmo.
- Podemos, no puedo, podemos hacerlo sin verle porque no necesito conocerlo si lo conoces tú, yo sólo he de verlo a través de ti...voy a necesitar un poco de sangre también...no te apures, un par de gotas bastarán, no hay que derrochar...
Nada, no encuentro ni una. La miro ahora, porque hace un comentario que no entiendo a la primera, luego miro hacía abajo para ver mi camiseta, ¿qué le pasa? Ah, vale, que me la puse del revés...me encojo de hombros.
- Es más bonita asi, creeme...por delante hay un zombie sacandole las tripas a un vaquero.
Se pone a encender las luces y yo voy detrás apagandolas, aunque dejo encendida la de la cocina. Me mira como inquiriendo el por qué, soy escueto.
- Luego soy yo el que paga la factura
No es sólo por eso, claro, pero no tengo por qué explicarle que si se levanta al baño y ve la luz el abuelo ya no vuelve a dormirse, porque bajará, se tomará un trago, y después de ese venbrán quince más, acabaré pasando la mañana limpiando sus vomitos antes de ir a clase y sin pegar ojo. No gracias.
Se pone a fregar sin que nadie se lo pida, no sabía que las rubias pijas supiesen usar jabón y freganzo...nunca te acostarás...seguro que Cabot no sabe...aparto la vista y no digo nada, le daría las gracias si se lo hubiese pedido pero no ha sido así, además no necesito que nadie me ayude con las tareas, llevo años apañandome solito...me enfuruño un poco, pero vuelvo a pensar en Cabot fregando platos y acabo emulando una sonrisa torcida.
Le tiendo el suyo una vez listo.
- Con cuidado...está muy caliente- advierto, porque no tengo leche para templarlo, acabo de mirar y no queda ni un cartón en la nevera, recuerdo que he de ir a la compra, debí ir anteayer, pero mi vida se complicó.
- ¿No hay nada que te haya llamado particularmente la atención?- pregunto en tono caustico sentandome en un taburete enfrente de ella, y alzo una ceja, esperando respuesta mientras soplo un poco para enfriar mi café.
Me devuelve mis palabras, sonrio y niego con la cabeza.
- No, no lo es...pero no es lo mismo borrarle la memoria a un tipo cualquiera solo porque no nos conviene a borrarsela a un capullo por necesidad y supervivencia...no pretendo dar clases de moral, aunque a veces parezcas creer que sí...ví tu cara el otro dia- respondo sin que pregunte- se te notaban a leguas las ganas de mandarme a la mierda...sólo me preocupa que alguno de nosotros acabe con complejo de Dios y nos mande a todos al foso...
Asiento, cuando se centra en lo que nos atañe inmediatamente y confirmo.
- Podemos, no puedo, podemos hacerlo sin verle porque no necesito conocerlo si lo conoces tú, yo sólo he de verlo a través de ti...voy a necesitar un poco de sangre también...no te apures, un par de gotas bastarán, no hay que derrochar...
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Jue Abr 12, 2012 11:51 pm
-conozco a alguien que ama cualquier tipo de zombies, y si viene con sangre y sesos incluidos, mucho mejor- respondí en aparente tranquilidad. y si, pudiera estar más tranquila, pero eso no significaba que estuviese en calma o en paz.
Bueno, entendía dos cosas. Jake parrish es un bipolar y que por primera vez este lado me gustaba, el ahorrador porque paga las facturas e incluso el que me inquiría con una deja acerca de varias cosas, como lavar los trastes (como si se me pudiesen caer las manos en el proceso) e incluso en el intentar saber que tan bien había hecho mi tarea. otro punto para el, porque unos ya se lso había ganado.
y sonreía ata que hablo de mandar al foso a los del circulo. yo podría hacerlo. algo en mi se removió y el sentirlo me causó escalofríos. No, no era embarazo, si no la certeza de que algo incierto que se encuentra dentro de ti puede hacerlo, porque esa parte no conoce límites. deje de sonreír, o al menos medio sonreír, más no dije nada -si, lo deseaba- acepte no tan de buena gana pero al menos con honestidad -y no voy a excusarme por ello, ni siquiera puedo decir que hubiese sido un mal día- porque claro, no era un mal día, era una mala vida, un mal siglo, encarnación lo que fuese que al final de cuentas se resumía de modo trivial en un mal karma -aunque dudo de que no hayas querido mandarme al demonio más de una ocasión... tu rostro te delata-
sin embargo extendí mi dedo, sangre velas y un café caliente a medio terminar. No era cuestión de cerrar los ojos si no de vernos uno al otro con la vela de por medio. el dijo que me concentrase en Benjamin y yo lo hice, no puesto en la cama si no en sus acciones, toda la tarde, la noche y lo que vio el, lo que yo vi. su voy y lo que puedo esperar de ese idiota. Parrish había acertado sin conocerle. mi padre era un capullo, era un imbécil que siempre desee darle su merecido, pero que jamás imagine bien los poderes del deseo.
El hizo lo demás, sin embargo me vio con mayor profundidad. me sentí incomoda pero no me aparté ni un centímetro. la flama entonces pareció moverse en una nueva dirección. no había aire, estaba segura, pero esta parecía tener dominio de si.
Mi energía volvió a entremezclarse con la suya. genial, a este paso entendería que fue lo que pasó con mi padre. y sin embargo en mi mente apareció Vanessa... vannesa lavando los platos, vanessa subiendo las escaleras de esa casa. tome aire pero no dije nada. Bien... adiós privacidad por lo visto.
el entonces soltó mi mano -no quería verlo- argumenté sin darle dato de que es lo que vi. porque detrás de Vanessa siempre se encontraba un hombre anciano -será curioso el cuidar a quien no quiere ser cuidado, en un circulo que ni siquiera esta formado. y no... además de las malas costumbres antiguas, no noto nada raro- y mentí... serían los obituarios?... quien sabe! en realidad eso era lo que menos me parecía fijarme, era morboso y enfermo el solo calcular la fecha de nacimiento y muerte de cada cual.
Bueno, entendía dos cosas. Jake parrish es un bipolar y que por primera vez este lado me gustaba, el ahorrador porque paga las facturas e incluso el que me inquiría con una deja acerca de varias cosas, como lavar los trastes (como si se me pudiesen caer las manos en el proceso) e incluso en el intentar saber que tan bien había hecho mi tarea. otro punto para el, porque unos ya se lso había ganado.
y sonreía ata que hablo de mandar al foso a los del circulo. yo podría hacerlo. algo en mi se removió y el sentirlo me causó escalofríos. No, no era embarazo, si no la certeza de que algo incierto que se encuentra dentro de ti puede hacerlo, porque esa parte no conoce límites. deje de sonreír, o al menos medio sonreír, más no dije nada -si, lo deseaba- acepte no tan de buena gana pero al menos con honestidad -y no voy a excusarme por ello, ni siquiera puedo decir que hubiese sido un mal día- porque claro, no era un mal día, era una mala vida, un mal siglo, encarnación lo que fuese que al final de cuentas se resumía de modo trivial en un mal karma -aunque dudo de que no hayas querido mandarme al demonio más de una ocasión... tu rostro te delata-
sin embargo extendí mi dedo, sangre velas y un café caliente a medio terminar. No era cuestión de cerrar los ojos si no de vernos uno al otro con la vela de por medio. el dijo que me concentrase en Benjamin y yo lo hice, no puesto en la cama si no en sus acciones, toda la tarde, la noche y lo que vio el, lo que yo vi. su voy y lo que puedo esperar de ese idiota. Parrish había acertado sin conocerle. mi padre era un capullo, era un imbécil que siempre desee darle su merecido, pero que jamás imagine bien los poderes del deseo.
El hizo lo demás, sin embargo me vio con mayor profundidad. me sentí incomoda pero no me aparté ni un centímetro. la flama entonces pareció moverse en una nueva dirección. no había aire, estaba segura, pero esta parecía tener dominio de si.
Mi energía volvió a entremezclarse con la suya. genial, a este paso entendería que fue lo que pasó con mi padre. y sin embargo en mi mente apareció Vanessa... vannesa lavando los platos, vanessa subiendo las escaleras de esa casa. tome aire pero no dije nada. Bien... adiós privacidad por lo visto.
el entonces soltó mi mano -no quería verlo- argumenté sin darle dato de que es lo que vi. porque detrás de Vanessa siempre se encontraba un hombre anciano -será curioso el cuidar a quien no quiere ser cuidado, en un circulo que ni siquiera esta formado. y no... además de las malas costumbres antiguas, no noto nada raro- y mentí... serían los obituarios?... quien sabe! en realidad eso era lo que menos me parecía fijarme, era morboso y enfermo el solo calcular la fecha de nacimiento y muerte de cada cual.
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Vie Abr 13, 2012 12:25 am
- No es nada personal, el noventa por ciento del tiempo quiero mandar al diablo a todo el mundo...si tuviese dinero para pagar a un loquero probablemente lo achacaría a que me siento abandonado por mis padres o alguna otra gilipollez, asi que supongo que es bueno no disponer de cincuenta dólares de sobra para que te digan sandeces...
Me mira, cómo evaluando si hablo en serio, no lo hago, sólo es sarcasmo, pero como ella no lo sabe aclaro:
- No lo hago, en realidad casi no recuerdo a mis padres y me da lo mismo.
El proceso es lento, la magia a veces es así, sobre todo porque tiene que conseguir una conexión con alguien al que apenas conoces. Al final conseguimos algo, si, la veo a ella, veo a su padre, o el que debe serlo, los cristales, el rencor, más las sensaciones que la situación en si, como un dibujo inacabado. Algo que no esperaba. No digo nada. Me centro en el asunto que nos interesa. La persona en sí. Su padre. Su cerebro. Sus recuerdos. Y borro lo que me parece conveniente. Luego me paro, dudando. Es el momento en que dejo el control y ella es la que se adentra en mi propia mente. Me parto de golpe al notar lo que ella ve, es un acto reflejo, por esto no me gustan las conexiones psiquicas.
"No quería verlo" Dice. Lo dice en serio. Pero no es eso. No la culpo.
- No importa
Digo, cabizbajo, sin emoción. Espero, preo no pregunta y entonces sí la miro. Quizá la juzgué mal, no parece una arpía metomentodo...y su vida, al parecer tampoco es el jardín del eden que le suponía.
- Si algún día quieres desaparecer...-me cuesta decir esto, no me gusta meterme en la vida de nadie- no tiene por qué recordar que tiene una hija...
Al ver que no responde cambio inmediatamente de tema, al menos espero que lo recuerde si alguna vez lo necesita.
- Deberías leer con mayor atención, hay vidas que dependen de ello....
Me levanto, aparto la vela, y retiro el resto, dejando la mesa limpia, y vuelvo a sentarme con el resto del café, ya frío, entre manos.
- No es que no me guste ser portavoz de malas noticias, pero hay un par de cosas que creo que deberías saber...a mi no me escucharán, dos se refieren a todos en general, y luego una te interesa a ti particularmente...¿prefieres las buenas o las malas noticias primero?
Asiento, cuando dice que lo bueno primero.
- Tu padre no recordará nada, las lesiones no son graves y lo tacharán como accidente, no eres una asesina y no creo que llegues a serlo o tu padre ya estaría criando malvas hace mucho...te pido disculpas por haberte seguido, al parecer era innecesario...hay formas de controlarlo, ¿sabes?...te resultará mucho más sencillo con un par de ejercicios diarios, no debería ser complicado para ti, al fin y al cabo eres animadora...
Ahí sonrio abiertamente, creo que no lo esperaba, porque carraspea, pero es que me hace gracia, intuyo lo que está pensando, algún ritual extraño...
- Nada de eso...sólo ejercicios de relajación...el yoga viene bien.
Espero.
- ¿Preparada para las malas?
Me mira, cómo evaluando si hablo en serio, no lo hago, sólo es sarcasmo, pero como ella no lo sabe aclaro:
- No lo hago, en realidad casi no recuerdo a mis padres y me da lo mismo.
El proceso es lento, la magia a veces es así, sobre todo porque tiene que conseguir una conexión con alguien al que apenas conoces. Al final conseguimos algo, si, la veo a ella, veo a su padre, o el que debe serlo, los cristales, el rencor, más las sensaciones que la situación en si, como un dibujo inacabado. Algo que no esperaba. No digo nada. Me centro en el asunto que nos interesa. La persona en sí. Su padre. Su cerebro. Sus recuerdos. Y borro lo que me parece conveniente. Luego me paro, dudando. Es el momento en que dejo el control y ella es la que se adentra en mi propia mente. Me parto de golpe al notar lo que ella ve, es un acto reflejo, por esto no me gustan las conexiones psiquicas.
"No quería verlo" Dice. Lo dice en serio. Pero no es eso. No la culpo.
- No importa
Digo, cabizbajo, sin emoción. Espero, preo no pregunta y entonces sí la miro. Quizá la juzgué mal, no parece una arpía metomentodo...y su vida, al parecer tampoco es el jardín del eden que le suponía.
- Si algún día quieres desaparecer...-me cuesta decir esto, no me gusta meterme en la vida de nadie- no tiene por qué recordar que tiene una hija...
Al ver que no responde cambio inmediatamente de tema, al menos espero que lo recuerde si alguna vez lo necesita.
- Deberías leer con mayor atención, hay vidas que dependen de ello....
Me levanto, aparto la vela, y retiro el resto, dejando la mesa limpia, y vuelvo a sentarme con el resto del café, ya frío, entre manos.
- No es que no me guste ser portavoz de malas noticias, pero hay un par de cosas que creo que deberías saber...a mi no me escucharán, dos se refieren a todos en general, y luego una te interesa a ti particularmente...¿prefieres las buenas o las malas noticias primero?
Asiento, cuando dice que lo bueno primero.
- Tu padre no recordará nada, las lesiones no son graves y lo tacharán como accidente, no eres una asesina y no creo que llegues a serlo o tu padre ya estaría criando malvas hace mucho...te pido disculpas por haberte seguido, al parecer era innecesario...hay formas de controlarlo, ¿sabes?...te resultará mucho más sencillo con un par de ejercicios diarios, no debería ser complicado para ti, al fin y al cabo eres animadora...
Ahí sonrio abiertamente, creo que no lo esperaba, porque carraspea, pero es que me hace gracia, intuyo lo que está pensando, algún ritual extraño...
- Nada de eso...sólo ejercicios de relajación...el yoga viene bien.
Espero.
- ¿Preparada para las malas?
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Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Vie Abr 13, 2012 1:27 am
Lo vio.
Lo vio y no tengo manera de esconderlo, ni de negarlo. Lo vio y me siento frágil.. lo vio y hace un comentario que bien pudiera entender como lastima, pero no es eso. Conozco esa mirada, no se porque, pero se que la conozco... son esas cosas que se sienten en los huesos. ha de ser la conexión. no hay explicación otra.
Pero resultaba que el no decía nada, no me compadecía simplemente dejaba estar las cosas, tanto que ante mi silencio el cambio de tema, no mucho mejor que el anterior. había noticias, las buenas y las malas. Realmente debería escoger las malas justo ahora?
Pero se lo agradezco. es casi un desconocido y nos une algo que nosotros no planeamos y aún así, no me hace sentir como si todo fuese un artificio. me hace sentir en cierta manera, como me haría sentir Alek, no algo de toda la vida, pero algo al final de cuentas, al menos algo más que lo que lo hacen la mayor parte de las personas y eso era un error. porque nuevamente, se me cae lo puta y maldita que puedo ser a pedazos y al final que es lo que quedará sin todo eso?
-prefiero la buena, dicen que demasiadas cosas malas pueden fundir la mente- y el corazón, dicho sea de paso. y me hace reír con lo de asesina. -no tenía 16 años, aún no podía hacerlo. ahora es diferente- respondo mientras le imito y de un trago me acabo el café.
Se que las cosas están mejor. el no recordará nada y si bien no se que hacer con la idea de estar enteramente sola, no es tan grave, solo que aún no estoy preparada para esto. borrarle la mente sería borrar lo único que me une a alguien en esta vida, sin contar a los kaiser o a este nuevo circulo de la diversión no solicitada. -creo que puedo hacerlo, incluso se contar de el 1 al 20- y no, no me molestaba, no ese tipo de molestia, al contrario por primera vez el que me picase me daba risa.
Lo de que extrañaba a sus padres es... algo que tengo en mente pero se que no es el momento, ni el lugar pero lo tendré presente. pocos ayudan sin pedir nada a cambio y el lo hace.... es como si de repente el se ganase mi respeto, algo que anteriormente no hubiera dado un solo duro.
-siempre estar lista, esa es la máxima- respondo de a poco recobrandome de ese sentimiento de vulnerabilidad, peor que sentirme desnuda. aún así me limité mientras tanto a no mostrar los lugares específicos. mis dedos pareciendo sensuales en vez de ocultar una herida en los labios parece buena idea.
El comienza a hablar, sin embargo de las historias, incluyendo la de una familia, con diferente apellido, y el circulo... habla de el mismo. lo entiendo y lo escucho, más que eso, comienzo a relacionar lo visto alguna vez, cuando estaba con Alex.
Si, puedo incluso identificar a quien podría ser mi antecesora.
-leíste muchos obituarios- dice el y yo simplemente asiento, no voy a negar algo que también el sabe. sin embargo su razonamiento cambia. Ella era bruja, ella se aburrió de ser una más de las buenas personas de Salem y ella... ella maldijo mi sangre salvando su vida y la de sus hijas
-la oscuridad- argumente yo, el a cambio me dijo algo que no esperaba -no Lerman... rubia, tu eres muerte, igual que todos tus ancestros-
Lo vio y no tengo manera de esconderlo, ni de negarlo. Lo vio y me siento frágil.. lo vio y hace un comentario que bien pudiera entender como lastima, pero no es eso. Conozco esa mirada, no se porque, pero se que la conozco... son esas cosas que se sienten en los huesos. ha de ser la conexión. no hay explicación otra.
Pero resultaba que el no decía nada, no me compadecía simplemente dejaba estar las cosas, tanto que ante mi silencio el cambio de tema, no mucho mejor que el anterior. había noticias, las buenas y las malas. Realmente debería escoger las malas justo ahora?
Pero se lo agradezco. es casi un desconocido y nos une algo que nosotros no planeamos y aún así, no me hace sentir como si todo fuese un artificio. me hace sentir en cierta manera, como me haría sentir Alek, no algo de toda la vida, pero algo al final de cuentas, al menos algo más que lo que lo hacen la mayor parte de las personas y eso era un error. porque nuevamente, se me cae lo puta y maldita que puedo ser a pedazos y al final que es lo que quedará sin todo eso?
-prefiero la buena, dicen que demasiadas cosas malas pueden fundir la mente- y el corazón, dicho sea de paso. y me hace reír con lo de asesina. -no tenía 16 años, aún no podía hacerlo. ahora es diferente- respondo mientras le imito y de un trago me acabo el café.
Se que las cosas están mejor. el no recordará nada y si bien no se que hacer con la idea de estar enteramente sola, no es tan grave, solo que aún no estoy preparada para esto. borrarle la mente sería borrar lo único que me une a alguien en esta vida, sin contar a los kaiser o a este nuevo circulo de la diversión no solicitada. -creo que puedo hacerlo, incluso se contar de el 1 al 20- y no, no me molestaba, no ese tipo de molestia, al contrario por primera vez el que me picase me daba risa.
Lo de que extrañaba a sus padres es... algo que tengo en mente pero se que no es el momento, ni el lugar pero lo tendré presente. pocos ayudan sin pedir nada a cambio y el lo hace.... es como si de repente el se ganase mi respeto, algo que anteriormente no hubiera dado un solo duro.
-siempre estar lista, esa es la máxima- respondo de a poco recobrandome de ese sentimiento de vulnerabilidad, peor que sentirme desnuda. aún así me limité mientras tanto a no mostrar los lugares específicos. mis dedos pareciendo sensuales en vez de ocultar una herida en los labios parece buena idea.
El comienza a hablar, sin embargo de las historias, incluyendo la de una familia, con diferente apellido, y el circulo... habla de el mismo. lo entiendo y lo escucho, más que eso, comienzo a relacionar lo visto alguna vez, cuando estaba con Alex.
Si, puedo incluso identificar a quien podría ser mi antecesora.
-leíste muchos obituarios- dice el y yo simplemente asiento, no voy a negar algo que también el sabe. sin embargo su razonamiento cambia. Ella era bruja, ella se aburrió de ser una más de las buenas personas de Salem y ella... ella maldijo mi sangre salvando su vida y la de sus hijas
-la oscuridad- argumente yo, el a cambio me dijo algo que no esperaba -no Lerman... rubia, tu eres muerte, igual que todos tus ancestros-
Laura Lerman- Mensajes : 226
Fecha de inscripción : 28/10/2011
Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Vie Abr 13, 2012 2:15 am
- no Lerman... rubia, tu eres muerte, igual que todos tus ancestros- interrumpo sus pensamientos, porque el tiempo corre y la noche avanza, quisiera dormir al menos un par de horas- yo soy oscuridad, tú eres muerte.
Me callo, segundos que se hacen minutos y ella aún no dice nada. No hay tiempo para que acabe de asimilarlo, continuo.
- Todas esas muertes...¿no te has parado a pensar en por qué tus antepasadas han tenido dos, tres y hasta seis maridos?...
Comenta algo, sonrio. Podría ser...en la época actual.
- Te recuerdo que el divorcio es algo meramente nuevo...no has leido todas las onomasticas...o quizá no los has relacionado con la fecha de matrimonio con tus ancestros...vuelve a leerlas, todos mueren cinco años después de contraer nupcias con las muejres Lerman...todos...- muevo la cabeza a ambos lados, intentando poner algo de humor donde no lo hay- podrías convencerme de que el matrimonio en sí es como un veneno...pero...me temo que lo que les sienta tan mal a esos chicos es compartir algo más que el aire con esas mujeres...
La miro ahora, directamente y a los ojos, porque no soy del tipo que esconde la mano cuando tira la piedra.
- Necesitamos a todo el circulo, rubia...no podemos perder a ninguno...
No sé si me entiende, aunque espero que sí, aún queda lo mejor por venir.
- Tenemos menos de una luna para cerrarlo, no somos los unicos bichos raros por aqui...ya saben que nuestros poderes se han activado, los sienten, como yo siento que se acercan, no estaremos a salvo si no estamos todos, y aún asi...tienes que convencerlos para empezar a prepararse...yo lo he intentado, pero no me escuchan. A ti te conocen.
Empieza a hablar, pero la interrumpo levantando la palma.
- Hay más...y es mejor dar todas las noticias malas a la vez...cada vez me cuesta más volver de la oscuridad...necesito que aprendas como matarme, si llega el caso...solo tú podrás hacerlo.
Me callo, segundos que se hacen minutos y ella aún no dice nada. No hay tiempo para que acabe de asimilarlo, continuo.
- Todas esas muertes...¿no te has parado a pensar en por qué tus antepasadas han tenido dos, tres y hasta seis maridos?...
Comenta algo, sonrio. Podría ser...en la época actual.
- Te recuerdo que el divorcio es algo meramente nuevo...no has leido todas las onomasticas...o quizá no los has relacionado con la fecha de matrimonio con tus ancestros...vuelve a leerlas, todos mueren cinco años después de contraer nupcias con las muejres Lerman...todos...- muevo la cabeza a ambos lados, intentando poner algo de humor donde no lo hay- podrías convencerme de que el matrimonio en sí es como un veneno...pero...me temo que lo que les sienta tan mal a esos chicos es compartir algo más que el aire con esas mujeres...
La miro ahora, directamente y a los ojos, porque no soy del tipo que esconde la mano cuando tira la piedra.
- Necesitamos a todo el circulo, rubia...no podemos perder a ninguno...
No sé si me entiende, aunque espero que sí, aún queda lo mejor por venir.
- Tenemos menos de una luna para cerrarlo, no somos los unicos bichos raros por aqui...ya saben que nuestros poderes se han activado, los sienten, como yo siento que se acercan, no estaremos a salvo si no estamos todos, y aún asi...tienes que convencerlos para empezar a prepararse...yo lo he intentado, pero no me escuchan. A ti te conocen.
Empieza a hablar, pero la interrumpo levantando la palma.
- Hay más...y es mejor dar todas las noticias malas a la vez...cada vez me cuesta más volver de la oscuridad...necesito que aprendas como matarme, si llega el caso...solo tú podrás hacerlo.
Jake Parrish- Admin
- Mensajes : 206
Fecha de inscripción : 28/10/2011
Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Laura Lerman Vie Abr 13, 2012 11:55 am
No me lo creí, me negué a creer ese tipo de cosas.
Aun así no parece estar mintiendo. me quedé callada, como una estúpida a la que le acaban de decir lo que el alma jamás sintió pero que al parecer Jake... por primera vez Jake, parecía tener más conocimiento de mi que yo misma.
El sin embargo, siguió dirigiendo mis pensamientos, induciéndome una conclusión a la que yo debía llegar. fruncí el ceño ante su pregunta -debieron ser mujeres muy hermosas, y el amor que se dice tener por lo general es algo falso, cuando más los necesitas, te dan la espalda a la primera oportunidad, así que porque no divorciarse?- humedecí mis labios al terminar de pronunciarlo y le sonreí. No, no haría de esto un drama y el tiempo con Benjamin, el tiempo sin mamá me habían entrenado ya lo suficiente como para construir corazas en el aire, tan solo de necesitar una nueva.
Una vez fui un ángel con alas blancas, una vez quise volar, una vez creí en la voluntad y el libre albedrio... una vez.
Pero al escuchar a Parrish hablar sobre mi familia me di cuenta de que no era un angel y mis alas no eran blancas, si no negras. Tal vez ni siquiera llevan plumas, tal vez desde hace años había perdido la capacidad de volar. cinco años....
Y el a cambio intenta hacérmelo más amable. no supe si odiarle, no supe a quien odiar y a quien culpar, ni siquiera supe si debía creer algo tan fuerte. El sin embargo sigio sonriendo, compartir algo más que aire, y no pude dejar de sonreír ante la elección de palabras.
-se que tienes un punto... pero aún no consigo verlo- argumenté para que de una vez por todas dejase de hablar así. siempre podrían existir coincidencias y las probabilidades, en mi caso, siempre se torcían.. podría ser nada.
No fue nada, lo fue todo. todos en el circulo... Alex?
-no- murmuro esta vez viendole a los ojos, el sin embargo sigue hablando. No puede ser cierto es más bien una mala interpretación. no soy María Magdalena, jamás eh tenido intención de ser victima bajo ninguna circunstancia.
Su boca seguía moviéndose, y le escuché, pero no podía prestarle atención. al diablo mi integridad, al diablo sobre algo que pensar, teníamos enemigos, y de eso no había algo más cierto. Alek había muerto por ello. no quería que eso volviese a ocurrir.
-dame tiempo- le pedí, casi suplique -entiendo lo de los enemigos, es solo....- sin embargo el me interrumpió. no quise ver a sus ojos. Así que simplemente cerré los míos. llevé una mano a mi pecho, en el lugar donde debiera estar mi corazón. No era posible, no así, sin siquiera pelear, pero sus pensamientos y el mío estaba claro que eran muy diferentes.
Mis ojos se abrieron de golpe -estas loco?- si, claro que lo estaba. me paré de inmediato, moviendo el banquillo y escuchando entonces la tos de un anciano. su abuelo, seguramente. por eso me acerqué a Parrish si no podía hablar, si ahora ni siquiera podría demostrar de manera satisfactoria mi enojo al menos e lo diría -me estas pidiendo que te mate... no se como hacerlo Parrish, pese a todo no soy una asesina, menos de alguien como tu. no tengo motivos y hablas de oscuridad, te invade?- e hice una pausa. sabía lo afilado que sonaban mis palabras y no me importaba mi índice paseo por su pecho, y se deslizo hasta su barba, llena de vello incipiente. más alto que yo, no me importaba en el momento
-no acepto lo de ser muerte, no acepto nada de las muertes. acepto el circulo, pero no más.. pero si fuese cierto, quien me va a salvar de a muerte? quien demonios acabará conmigo?; tu, yo o los dos?- y como si quemara me alejé, burlándome en si de lo que yo misma había dicho.
-tengo que irme- y comencé a retroceder. como era de esperarse el no me detuvo Parrish volvió a repetírmelo "necesitamos a los seis"
-lo se...- respondí sin más -trabajaré en el circulo- y sin más, me fui.
Supe que pise el acelerador a toda marcha, que forcé incluso las velodidades. en mi mundo pocas cosas eran reales. mi mundo era un lugar maldito con algunas excepciones. sabía lo que quería, lo que necesitaba. no me importó como quedase estacionado el auto. ni siquiera tenía que llegar a casa, porque en casa nadie me esperaba. ese lugar desde hace años era una prisión y tumba, no un hogar.
Yo tenía mi hogar y tenía un nombre.. los brazos de Alex Kaiser. tantas ganas de derramar lagrimas tanta imposibilidad de creer debería estar prohibido. fue prohibido.
No podía resistirme a estar con el, era más que mi novio. le amaba..... le tenía devoción.
Su ventana estaba abierta y fui directa hacia el. No me pregunto nada y simplemente fue directo hacia mi. esto era lo más real que tenía. sus ojos observándome, el deseo de estar con el, las ganas de compartirlo todo.. la imperiosa necesidad de sentirle a el como mi única cosa verdadera, mu punto cardinal y lo abracé con fuerza, dudando de que hacer si besarlo con desesperación o solo aferrarme a el y rogar porque me protegiera, porque las pesadillas desaparecieran entre sus brazos. al final, hice la dos cosas
-te amo- le confesé nuevamente en un susurro cuando el simplemente me cargaba en vilo para después recostarme sobre su lecho, dándome un lugar al lado suyo, abrazándome apenas pudo llegar el a la cama. me calmaba.
Parrish debería estar equivocado en ello. algo tan bello como lo que sentía no podría dañarle, no podría dañarnos. Ya conoció del amor a causas suyas, de Alex.. el universo no debería siquiera inter quitármelo.
Porque de quitármelo... preferiría jamás haberle conocido y jamás haberle amado. Dolería menos.
Aun así no parece estar mintiendo. me quedé callada, como una estúpida a la que le acaban de decir lo que el alma jamás sintió pero que al parecer Jake... por primera vez Jake, parecía tener más conocimiento de mi que yo misma.
El sin embargo, siguió dirigiendo mis pensamientos, induciéndome una conclusión a la que yo debía llegar. fruncí el ceño ante su pregunta -debieron ser mujeres muy hermosas, y el amor que se dice tener por lo general es algo falso, cuando más los necesitas, te dan la espalda a la primera oportunidad, así que porque no divorciarse?- humedecí mis labios al terminar de pronunciarlo y le sonreí. No, no haría de esto un drama y el tiempo con Benjamin, el tiempo sin mamá me habían entrenado ya lo suficiente como para construir corazas en el aire, tan solo de necesitar una nueva.
Una vez fui un ángel con alas blancas, una vez quise volar, una vez creí en la voluntad y el libre albedrio... una vez.
Pero al escuchar a Parrish hablar sobre mi familia me di cuenta de que no era un angel y mis alas no eran blancas, si no negras. Tal vez ni siquiera llevan plumas, tal vez desde hace años había perdido la capacidad de volar. cinco años....
Y el a cambio intenta hacérmelo más amable. no supe si odiarle, no supe a quien odiar y a quien culpar, ni siquiera supe si debía creer algo tan fuerte. El sin embargo sigio sonriendo, compartir algo más que aire, y no pude dejar de sonreír ante la elección de palabras.
-se que tienes un punto... pero aún no consigo verlo- argumenté para que de una vez por todas dejase de hablar así. siempre podrían existir coincidencias y las probabilidades, en mi caso, siempre se torcían.. podría ser nada.
No fue nada, lo fue todo. todos en el circulo... Alex?
-no- murmuro esta vez viendole a los ojos, el sin embargo sigue hablando. No puede ser cierto es más bien una mala interpretación. no soy María Magdalena, jamás eh tenido intención de ser victima bajo ninguna circunstancia.
Su boca seguía moviéndose, y le escuché, pero no podía prestarle atención. al diablo mi integridad, al diablo sobre algo que pensar, teníamos enemigos, y de eso no había algo más cierto. Alek había muerto por ello. no quería que eso volviese a ocurrir.
-dame tiempo- le pedí, casi suplique -entiendo lo de los enemigos, es solo....- sin embargo el me interrumpió. no quise ver a sus ojos. Así que simplemente cerré los míos. llevé una mano a mi pecho, en el lugar donde debiera estar mi corazón. No era posible, no así, sin siquiera pelear, pero sus pensamientos y el mío estaba claro que eran muy diferentes.
Mis ojos se abrieron de golpe -estas loco?- si, claro que lo estaba. me paré de inmediato, moviendo el banquillo y escuchando entonces la tos de un anciano. su abuelo, seguramente. por eso me acerqué a Parrish si no podía hablar, si ahora ni siquiera podría demostrar de manera satisfactoria mi enojo al menos e lo diría -me estas pidiendo que te mate... no se como hacerlo Parrish, pese a todo no soy una asesina, menos de alguien como tu. no tengo motivos y hablas de oscuridad, te invade?- e hice una pausa. sabía lo afilado que sonaban mis palabras y no me importaba mi índice paseo por su pecho, y se deslizo hasta su barba, llena de vello incipiente. más alto que yo, no me importaba en el momento
-no acepto lo de ser muerte, no acepto nada de las muertes. acepto el circulo, pero no más.. pero si fuese cierto, quien me va a salvar de a muerte? quien demonios acabará conmigo?; tu, yo o los dos?- y como si quemara me alejé, burlándome en si de lo que yo misma había dicho.
-tengo que irme- y comencé a retroceder. como era de esperarse el no me detuvo Parrish volvió a repetírmelo "necesitamos a los seis"
-lo se...- respondí sin más -trabajaré en el circulo- y sin más, me fui.
Supe que pise el acelerador a toda marcha, que forcé incluso las velodidades. en mi mundo pocas cosas eran reales. mi mundo era un lugar maldito con algunas excepciones. sabía lo que quería, lo que necesitaba. no me importó como quedase estacionado el auto. ni siquiera tenía que llegar a casa, porque en casa nadie me esperaba. ese lugar desde hace años era una prisión y tumba, no un hogar.
Yo tenía mi hogar y tenía un nombre.. los brazos de Alex Kaiser. tantas ganas de derramar lagrimas tanta imposibilidad de creer debería estar prohibido. fue prohibido.
No podía resistirme a estar con el, era más que mi novio. le amaba..... le tenía devoción.
Su ventana estaba abierta y fui directa hacia el. No me pregunto nada y simplemente fue directo hacia mi. esto era lo más real que tenía. sus ojos observándome, el deseo de estar con el, las ganas de compartirlo todo.. la imperiosa necesidad de sentirle a el como mi única cosa verdadera, mu punto cardinal y lo abracé con fuerza, dudando de que hacer si besarlo con desesperación o solo aferrarme a el y rogar porque me protegiera, porque las pesadillas desaparecieran entre sus brazos. al final, hice la dos cosas
-te amo- le confesé nuevamente en un susurro cuando el simplemente me cargaba en vilo para después recostarme sobre su lecho, dándome un lugar al lado suyo, abrazándome apenas pudo llegar el a la cama. me calmaba.
Parrish debería estar equivocado en ello. algo tan bello como lo que sentía no podría dañarle, no podría dañarnos. Ya conoció del amor a causas suyas, de Alex.. el universo no debería siquiera inter quitármelo.
Porque de quitármelo... preferiría jamás haberle conocido y jamás haberle amado. Dolería menos.
Laura Lerman- Mensajes : 226
Fecha de inscripción : 28/10/2011
Re: De cabeza al infierno. Jake y Laura 1.
por Jake Parrish Vie Abr 13, 2012 11:31 pm
- Eres un poco cinica, ¿no, rubia?...es curioso que una chica que jura estar enamorada o al menos quiere dar esa impresión admita con esa pasión que el amor verdadero es practicamente inexistente...
Me encojo de hombros, mirandola, ligeramente divertido.
- aunque la idea nos viene bien...mucho mejor si es eso lo que crees. Mejor para todos.
Loco? Loco yo? No, creo que soy la persona más cuerda que conozco, de hecho. Esos ojos hiperabiertos que me miran como si me hubiese crecido un cuerno me causan ligera diversión, pero no la suficiente como para sonreir, el tema es serio e intento que lo entienda como tal.
- Lo que te pido es que me ayudes...yo si sé cómo hacerlo, si me dejas te enseñaré, no estoy loco, y tampoco tengo dudas.
que no lo acepta dice...¿que no lo acepta?...crios...lo dice como si de verdad creyese que tiene elección, eso sí tiene gracia.
- ¿De verdad crees que tienes la posibilidad de escoger?
Pero no me escucha, ya no me escucha, y antes de que termine de hablar ya ha huido. Podría decirle qu e no sirve de nada, no puede huir de ti mismo. Pero supongo que lo descubrirá solita. Me retiro, con pausa, mirando el relog y comprobando que al menos dormiré algo esa noche. No es que hayamos avanzado mucho, pero no esperaba que lo asumiese a la primera. Sólo espero que no sea muy lenta de entendederas...no nos sobra el tiempo.
No sé de ella hasta una semana más tarde, apenas la he visto en clases, aunque me he acercado a instarle a reaccionar, indicandole el horario en que estaría disponible, pero cuando aparece vuelve a hacerlo a la hora que le parece. En este caso las nueve de la noche cuando tengo turno a las once. Le abro la puerta y miro el relog, pero no digo nada, solo la entorno para dejarla pasar.
Me encojo de hombros, mirandola, ligeramente divertido.
- aunque la idea nos viene bien...mucho mejor si es eso lo que crees. Mejor para todos.
Loco? Loco yo? No, creo que soy la persona más cuerda que conozco, de hecho. Esos ojos hiperabiertos que me miran como si me hubiese crecido un cuerno me causan ligera diversión, pero no la suficiente como para sonreir, el tema es serio e intento que lo entienda como tal.
- Lo que te pido es que me ayudes...yo si sé cómo hacerlo, si me dejas te enseñaré, no estoy loco, y tampoco tengo dudas.
que no lo acepta dice...¿que no lo acepta?...crios...lo dice como si de verdad creyese que tiene elección, eso sí tiene gracia.
- ¿De verdad crees que tienes la posibilidad de escoger?
Pero no me escucha, ya no me escucha, y antes de que termine de hablar ya ha huido. Podría decirle qu e no sirve de nada, no puede huir de ti mismo. Pero supongo que lo descubrirá solita. Me retiro, con pausa, mirando el relog y comprobando que al menos dormiré algo esa noche. No es que hayamos avanzado mucho, pero no esperaba que lo asumiese a la primera. Sólo espero que no sea muy lenta de entendederas...no nos sobra el tiempo.
No sé de ella hasta una semana más tarde, apenas la he visto en clases, aunque me he acercado a instarle a reaccionar, indicandole el horario en que estaría disponible, pero cuando aparece vuelve a hacerlo a la hora que le parece. En este caso las nueve de la noche cuando tengo turno a las once. Le abro la puerta y miro el relog, pero no digo nada, solo la entorno para dejarla pasar.
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